Invitados por CCOO y UGT, 20 sindicatos de 11 países se han reunido esta mañana en un hotel de la Gran Vía madrileña para hablar de la crisis, de cómo salir de ésta y de cómo hacer converger las diferentes estrategias interestatales. A la salida del encuentro, a puerta cerrada, los dirigentes españoles Ignacio Fernández Toxo (CCOO) y Cándido Méndez (UGT) comentaron a los medios que habían hablado de hacer una manifestación conjunta en octubre. "Nadie de nosotros concibe la salida del euro de ningún país", zanjó Méndez.
Durante una pausa, Annelie Buntenbach, portavoz de la poderosísima Federación de Sindicatos Alemanes (DGB en alemán, siete millones de afiliados), atendió a este medio y a otra compañera de eldiario.es. Buntenbach defiende a los trabajadores españoles ante las imputaciones que les tildan de perezosos procedentes de países del Norte, empezando por el suyo. Es más: el año pasado, Buntenbach defendió el “derecho a hacer la siesta” a la española porque “reduce el riesgo de infarto y permite levantarte lleno de energía”. “Necesitamos otra estructuración del mercado de trabajo que la que nos venden los Gobiernos”, asegura. “Un salario mínimo europeo que garantice unos estándares de vida o la desaparición de la presión laboral en el trabajo”.
“España y otros países hacen reformas y las justifican diciendo que Alemania las hizo. Pero uno no puede coger lo peor del modelo alemán, nuestro modelo, y encajarlo en el suyo. La realidad es que el Hartz IV –medida más importante de la llamada Agenda 2010, la reforma laboral alemana- ha creado mucha precariedad, ha traído el empeoramiento de las prestaciones por desempleo y ha dejado a una franja enorme de la población con salarios muy bajos. Uno no puede importar los minijobs y marginar los remedios para levantar la economía, que pasan por la inversión en Seguridad Social, infraestructuras o I+D”.
Buntenbach valoró los estudios, análisis y estadísticas que sitúan a Berlín en recesión en 2013. “Si Merkel intenta algo contra los trabajadores germanos, que se prepare. Volveremos a organizar las huelgas y manifestaciones de 2008 y 2009”. La dirigente sindical recordó que también este año hubo huelgas en diferentes sectores (metalurgia, funcionarios) para reclamar un aumento de salario, que finalmente se produjo. También evocó la presencia sindical en los consejos de Administración de las empresas.
¿Cómo andan las relaciones con Angela Merkel? “Sigue habiendo diálogo, parece que más que aquí”, reconoció. “La política no se concibe sin acuerdo. Todos los Gobiernos deberían de discutir con sus sindicatos”.