Luz verde a la mayor OPV de la historia. El consejo de administración de la petrolera pública saudí Aramco aprobará la próxima semana dar inicio a los trámites para la colocación, apenas un mes después de que algunas de sus instalaciones sufrieran un ataque con drones que afectó a una parte significativa de su producción. Según una información publicada por Expansión, que a su vez cita a la agencia internacional Bloomberg, la reunión del consejo tendrá lugar el 17 de octubre.
Los planes del Gobierno saudí pasan por colocar hasta un 5% del capital de la compañía, para el que se estima un valor próximo a los 100.000 millones de dólares. La operación prevé desarrollarse en varias fases. En un primer momento, Aramco venderá entre el 1% y el 2% del capital en el mercado de valores local; posteriormente, la empresa irá realizando colocaciones en mercados internacionales, hasta completar el 5%.
En las últimas horas, el consejero delegado de Aramco, Amin Nasser, confirmó que los ataques sufridos no afectarían al proceso de salida a Bolsa de la petrolera, pese a su impacto en la producción. Los efectos se reflejaron en una muy notable subida del petróleo, que llegó a dispararse más de un 14% en una sola sesión, hecho inédito desde comienzos de la década de los 90, con motivo de la Guerra del Golfo.
Apertura económica
Sin embargo, las aguas no tardaron en volver a su cauce en los mercados de materias primas toda vez que Aramco aseguró que sería capaz de recuperar el ritmo de producción previo a los atentados antes de lo previsto.
La salida a Bolsa de Aramco se enmarca en la estrategia del Gobierno saudí denominada Visión 2030, encaminada a una progresiva apertura del país, especialmente desde el punto de vista económico, y a reducir la dependencia del petróleo.
Para la operación, la petrolera pública contará con cerca de una decena de bancos de inversión como asesores, entre los que se encuentra Santander.