La constructora Avintia, aliada con el fondo de inversión mexicano Cemex, ha montado el primer edificio residencial íntegramente prefabricado o de viviendas industrializadas en altura en España, según precisan fuentes de mercado a Vozpópuli.
Se trata de una promoción puesta en el mercado en alianza con el gestor y promotor especializado en viviendas para alquiler Tectum-Locare. La inversión total ha rondado los 15 millones de euros y supone un hito en un mercado apenas explorado a nivel nacional por el que también apuestan promotoras cotizadas como Aedas Homes y Metrovacesa.
La promoción está diseñada para su uso residencial en alquiler y se ha desplegado sobre el municipio madrileño de Móstoles, a 18 kilómetros de la capital del país. Albergará hasta 124 viviendas de protección pública de precio básico destinadas al alquiler asequible de entre 60 y 64 metros cuadrados.
Las viviendas tendrían rentas de entre 650 y 730 euros mensuales, gastos incluidos. El edificio consta de siete alturas y dispone de elementos comunes como piscina comunitaria, parque infantil, sala común, buzones electrónicos, aire acondicionado y cerraduras inteligentes.
Mercado incipiente
Según reivindican desde Tectum, "las técnicas empleadas han reducido en un 30% el impacto ambiental" respecto al proceso constructivo tradicional y "limitar los deshechos generados en obra, además de disminuir los riesgos laborales".
El mercado de viviendas industrializadas o 'prefabricadas' en España es irrisorio: hoy no llega ni al 1% del mercado. "Tradicionalmente (en España), la construcción de viviendas se ha caracterizado por mantenerse invariable en el tiempo: la forma de construir es similar en la actualidad a la de hace 50 años. Esto provoca que sea un sector intensivo en mano de obra y sin apenas modernización de la estructura productiva, lo que redunda en los extremadamente largos tiempos de ejecución del producto", dicen desde la patronal de promotores de Madrid, que ha abogado por el impulso a la vivienda industrializada como palanca del sector en la era post covid.
En España solo existe un puñado de empresas especializadas en desarrollar viviendas prefabricadas, como Atlántida, Homm, Bauen y Avintia. Las fábricas, hoy en día, han de situarse en un radio no superior a 200-300 km del lugar de destino. Todas ellas realizan, principalmente, viviendas unifamiliares. Avintia apunta a levantar 1.000 viviendas prefabricadas anuales desde 2021.
El 10% de las nuevas viviendas
Tal y como informó este medio, el horizonte de distintas fuentes del sector pasa por que la capacidad productiva de vivienda industrializada en España represente el 10% de la nuevas viviendas antes de 2025. Los fondos de inversión han invertido en levantar unas 7.000 viviendas baratas para alquiler desde 2019. Se estima que hacen falta más de un millón de viviendas nuevas de alquiler antes de 2030.
Entre las ventajas que ofrece la vivienda industrializada a los promotores y construcción sobresale una reducción del 30-50% en los tiempos de obra y una mejor imagen de cara a potenciales empleados, que escasean en el sector.
Entre sus principales desafíos está igualmente la falta de mano de obra especializada en construcción industrial, los elevados costes iniciales (que se espera que sean compensados por economías de escala) y, precisamente, la complejidad de su construcción total en altura.