Fumata blanca sobre la bocina. El mismo día que expiraba el límite fijado por el Banco Central Europeo (BCE), Unicaja elige al consejero delegado que sustituirá a Manuel Menéndez (ex de Liberbank). Como publicó este medio, será Isidro Rubiales, mano derecha del presidente, Manuel Azuaga, el nuevo CEO que intentará poner fin a la guerra en la cúpula tras dos años de disputas entre el bando andaluz y el bloque asturiano.
Tras la integración legal de Liberbank en julio de 2021, el supervisor único dio dos años a la entidad para reconfigurar el diseño de la cúpula. En un consejo celebrado en la mañana de este lunes, Rubiales se ha impuesto al otro candidato final: José Sevilla, exconsejero delegado de Bankia.
La elección del nuevo CEO se ha aprobado por unanimidad. Rubiales era el candidato de la Fundación Unicaja, el máximo accionista del banco con un 30,2% del capital. En un principio, algunos accionistas del bando asturiano, como la Fundación Cajastur, amagaron con votar en contra, aunque finalmente se ha decantado por apoyar al nuevo consejero delegado, según fuentes financieras.
El banco ha escenificado con la firma de cazatalentos Spencer Stuart un proceso de búsqueda de candidatos, entre los que se contactó al exconsejero delegado de Bankia. Un "formalismo jurídico" para dar la sensación de "neutralidad" en la elección del nuevo máximo ejecutivo y contentar al BCE, ya que existía consenso en torno a Rubiales desde hace tiempo entre los principales accionistas y el supervisor.
Rubiales, hasta ahora al frente de la Dirección General Adjunta al presidente, de Control, Estrategia y Relaciones con supervisores, no podrá asumir su nuevo puesto como máximo ejecutivo hasta recibir el informe de idoneidad del BCE, conocido en el argot financiero como fit & proper. Se prevé que el visto bueno lo reciba entre septiembre y octubre, según fuentes conocedoras.
Carta de presentación
Por este motivo, Azuaga mantendrá las funciones ejecutivas hasta el nombramiento formal de Rubiales. Ahora bien, llegado ese momento, el presidente de Unicaja dejará todos los poderes ejecutivos y se convertirá en un presidente institucional.
Como primera decisión como consejero delegado electo, Rubiales ha prometido a los accionistas pedir al BCE después del verano autorización para hacer una recompra de acciones por un importe de 100 millones, según las fuentes.
También se espera que el fin en la guerra de gobernanza provoque una mejora sustancial de la cuenta de resultados en la última parte del año, después de una política agresiva como medida de presión contra Menéndez, como reconocía la unidad de banca de inversión de Santander en un informe reciente.
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Este banco es la casa de los líos. Acabará fagocitada por la Caixa.