Banco Popular no incluyó entre sus participadas a la empresa Gestión de Activos Castellana 40 (GAC40) hasta el ejercicio 2016, después de que el Banco Central Europeo detectara "deficiencias" en la condonación de una deuda de 220 millones de euros por parte de la entidad española a dicha sociedad.
Como publicó este miércoles este diario, a finales de 2016 el consejo de administración de Banco Popular trató al menos en un par de reuniones el resultado de una inspección del Banco Central Europeo en la que el organismo había detectado "deficiencias relevantes" en esa llamativa condonación de deuda.
En un informe presentado al consejo del Popular por los máximos directivos de los servicios jurídicos y de auditoría interna de la entidad, se explicó que la operación había sido aprobada por el entonces consejero delegado de la entidad, Francisco Gómez, y que esta "fue beneficiosa para el Banco y se realizó para permitir la viabilidad de la sociedad cuya situación financiera la abocaba a la liquidación".
GAC40 agrupa las empresas que pertenecieron a José Ramón Carabante y a Trinitario Casanova
Fuentes cercanas a la antigua dirección ejecutiva de Banco Popular con las que ha contactado este diario sostienen que lo que el BCE afeó al Popular fue no haber computado como empresa participada a GAC40 en lugar de como sociedad acreedora, y que la condonación no se hubiera votado en el consejo de administración y sí en un comité de dirección en el que se le dio luz verde.
GAC40 fue una sociedad constituida en 2012 por José Fernando Martínez Blanco, experto en liquidaciones de empresas y reestructuraciones, que se hizo cargo de las sociedades de José Ramón Carabante, empresario del boom inmobiliario.
Entre las empresas agrupadas por Martínez Blanco en GAC40 que pertenecieron a Carabante estaba Grupo Hispania, compañía de Trinitario Casanova que traspasó a Carabante en 2008 y que incluía, además de centros comerciales y edificios residenciales y de oficinas, una participación del 0,6% en Banco Popular.
De acuerdo a fuentes consultadas por este diario cercanas a las empresas y a la entidad financiera, Martínez Blanco fue la persona designada por Banco Popular para hacerse cargo de ese grupo de empresas que arrastraban una deuda superior a los 500 millones de euros.
A pesar de que GAC40 presentaba una elevada deuda, patrimonio neto negativo y pérdidas millonarias, Popular fue refinanciando a la empresa hasta que a finales de 2014 decidió la condonación de esos 220 millones de euros de deuda.
