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AmRest (La Tagliatella) aplicó subidas de precios “responsables” pese a su récord de ventas

El grupo polaco, que opera en varios países restaurantes de KFC o Burger King, apunta a que la subida de precios se produjo para preservar márgenes, después de detectar una elevada presión en costes

  • Un restaurante de La Tagliatella, del grupo AmRest.

AmRest, dueña de restaurantes como La Tagliatella, Bacoa o Sushi Shop, también subió sus precios durante el primer trimestre. Lo hizo, según explica en sus resultados remitidos a la CNMV, para evitar los daños por "la elevada presión en costes".

En concreto, el grupo, que opera en diversos países establecimientos de KFC, Pizza Hut, Burger King o Starbucks, apunta a que consiguió mitigar esa presión en costes "gracias al incremento de ventas y los avances en términos de digitalización y eficiencia", pero también por el encarecimiento del precio de venta de sus productos.

Según explica AmRest en su informe de resultados, consultado por Vozpópuli, han sido "incrementos de precios de forma responsable, encaminados a preservar márgenes y sin impedir un incremento en el número de transacciones realizadas".

Se trata de una presión en costes que, apunta el gigante de la restauración, también está relacionada con la guerra en Ucrania. "Desde la última parte del trimestre, la invasión rusa de Ucrania ha impactado a la actividad económica y, sobre todo, a las dinámicas de precios, encareciendo numerosas materias primas e incrementando así las ya elevadas presiones inflacionistas y el tensionamiento sobre las cadenas globales de suministro", recuerda en sus resultados.

AmRest bate su récord de ingresos

De hecho, a mediados de marzo Amrest "decidió iniciar el proceso para suspender temporalmente las operaciones en Rusia", para lo que ha interrumpido las inversiones en el país y está hoy en negociaciones con el franquiciador para transferir sus operaciones de Pizza Hut en Rusia a un operador local.

No obstante, pese a esta presión en los costes, AmRest cerró el mejor primer trimestre en ventas de su historia. El grupo terminó marzo con unos ingresos de 507 millones de euros, un 33,4% más que en el mismo periodo del año anterior y un 14% más que en 2019. En los tres primeros meses del año, además, dejó atrás las pérdidas de 20,2 millones de euros del año pasado y se anotó un beneficio de 900.000 euros.

En lo que respecta a España, este mercado cerró el trimestre con unas ventas de 64,5 millones de euros, el 12,7% del total, incrementando así su peso en el grupo dos puntos respecto al mismo periodo del año pasado (10,7%). A cierre del trimestre, y con actividad e Europa Central, del Este, Occidental, Rusia y China, AmRest operaba 2.434 restaurantes (propios y franquiciados), dos menos que a cierre de año.

En su presentación de resultados, el director financiero del grupo, Eduardo Zamarripa, recalcó que las cifras "demuestran aún más la resistencia y la sostenibilidad del modelo de negocio de AmRest". "La relajación gradual de las restricciones relacionadas con la pandemia que hemos visto en todos los mercados ha dado lugar a un rendimiento empresarial muy sólido, ayudándonos a conseguir el récord histórico de ingresos en un primer trimestre", señaló.

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