España registró 20,61 millones de afiliados medios en el mes de abril, 238.436 más que en marzo, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Por contra, el paro descendió en 73.890 personas hasta volver a situarse por debajo de los 3 millones, tal y como reflejan los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) difundidos este jueves por el Ministerio de Trabajo.
Los meses de abril suelen ser buenos en términos de afiliación y paro por el efecto que tiene la Semana Santa, pero este ha sido excepcionalmente positivo, el mejor de la serie histórica. El año pasado, por ejemplo, se crearon 184.600 empleos y el paro bajó en unas 86.300 personas.
En la afiliación el mayor crecimiento se localiza en la hostelería, con un crecimiento mensual en el Régimen General del 9% en términos relativos y de 119.618 personas en términos absolutos. Esto implica que algo más de la mitad de los empleos que se crearon en abril corresponden a la hostelería.
Entre los autónomos, que en términos generales subieron en casi 13.000 personas, también destacan aquellos vinculados a la hostelería (+1,4%, 4.322 personas). En total, entre trabajadores por cuenta propia y por cuenta ajena, los afiliados relacionados con la hostelería ascendieron a 1,78 millones de personas.
En todo caso, si se analizan las actividades económicas, en general fue un buen mes en todas ellas: en los servicios se ganaron 208.302 afiliados; en la agricultura, 16.776; en la industria; 7.965; y en la construcción; 5.394. Estos datos son significativamente mejores que los registrados el año pasado, cuando los afiliados de la hostelería crecieron en 173.849 personas; los de la agricultura, en 8.279; y los de la industria, en 3.666. De hecho, la construcción perdió 1.218 afiliados.
El paro, por su parte, no ha evolucionado tan excepcionalmente bien como la afiliación este abril. De hecho, es la menor bajada en un mes de abril desde 2021 (cuando sólo descendió en 39.012 personas) y, sin este año todavía marcado por la pandemia y las restricciones y sin tener en cuenta el 2020, desde 2013 (-46.050).
En todo caso, el cuarto mes del año se cerró con un total de 2,79 millones de parados, el registro más bajo en un abril desde 2008. Por actividad económica, también se aprecia un especial avance en los servicios, con 52.216 parados menos. También bajó el paro en la industria (-5.391), la agricultura (-4.296) y la construcción (-4.014).
El efecto de los fijos discontinuos
En la desigual evolución de la afiliación y el paro, que no necesariamente tienen que ir aparejados, este mes han podido tener una especial influencia los fijos discontinuos, que en el último año se han convertido en una modalidad contractual protagonista. El hecho es que el fijo discontinuo permite al empleador dejar sin trabajo ni sueldo al empleado durante los periodos de menos carga de trabajo, aunque el contrato sigue activo.
Esto tiene implicaciones estadísticas. Cuando un trabajador está 'inactivo', no se contabiliza nunca como parado por el Servicio Público de Empleo Estatal, incluso aunque esté registrado y cobrando una prestación por desempleo. Se contabilizan en otra casilla que se denomina 'demandante de empleo con relación laboral'.
Este dato se desglosará dentro de unos días, pero en el informe publicado este jueves por el SEPE ya se avanza un descenso de unos 70.000 demandantes de empleo ocupados, un cajón más amplio en el que se incluye a estos demandantes de empleo con relación laboral.
Por otra parte, los fijos discontinuos, cuando dejan de estar activos, sí se dan de baja en la afiliación a la Seguridad Social y, cuando se les activa para trabajar, se les registra con un alta nueva. Es decir, que si bien en el paro no tienen un efecto estadístico, en la afiliación sí. Este abril, con la gran bolsa de contratos fijos discontinuos generados en la hostelería y el incremento de la demanda por la Semana Santa, se podría haber producido una activación masiva de dichos trabajadores.
De hecho, si se observan los datos de contratos creados en el mes de abril, la única modalidad indefinida en la que se registraron más que en marzo fue en la del fijo discontinuo, con 5.201 contratos más (3%). Se firmaron menos contratos indefinidos (-14%), en general, y temporales (-10%) que en marzo. Los 530.537 contratos fijos y 626.779 temporales firmados también son un 24% y 17% menos, respectivamente, que en abril de 2022.
Al ser preguntado por el posible efecto de los fijos discontinuos en los datos de abril, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, aseguró en la rueda de prensa posterior a la publicación de los datos que "las fluctuaciones entre la afiliación y el paro son bastante normales".
Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez, comentó que "otro elemento es la evolución de la tasa de la actividad, que indica que el mercado de trabajo está atrayendo a personas que hace un tiempo no tenía la perspectiva de trabajar".