La factoría de Vigo inició su actividad en 1958 con la producción del Citroën AZU, derivado de mítico 2CV, y ha fabricado desde entonces más de siete millones de vehículos comerciales ligeros, entre los que destacan el Citroën C15 y todas las generaciones de Citroën Berlingo y Peugeot Partner. Pero además de por los vehículos comerciales, Vigo ha sido referencia por la producción de monovolúmenes, un segmento en horas bajas desde la llegada del fenómeno SUV y que se ha visto reflejado en una caída de la demanda que ha llevado a Citroën a tomar la decisión de dejar de producir el Grand C4 que se fabricaba en la planta viguesa.

Un pequeño paso atrás que llega después de conocerse que la tercera gigafactoría de baterías de Stellantis tampoco se construirá aquí sino en Italia, tras adjudicar las dos primeras a Francia y Alemania.

Una decisión de la dejar de comercializar el monovolumen Grand C4 SpaceTourer que va a suponer que su producción en la planta de Vigo se detendrá a principios de julio una vez se hayan atendido los pedidos existentes, tras alcanzar los 352.243 clientes en todo el mundo, según ha informado la compañía en un comunicado.

Y es que Citroën ha vendido más de 4,5 millones de monovolúmenes en todo el mundo en los casi 30 años que llevan comercializando este tipo de vehículos y que se inició en 1994 cuando lanzó el modelo Evasion, que ofrecía siete plazas y se distinguía por sus puertas laterales correderas. Rediseñado en 1998, se fabricó hasta el año 2002 y de este vehículo se vendieron más de 120.000 unidades.

El Evasion dejó su puesto al C8, que se fabricó hasta junio de 2014, con unas ventas acumuladas de más de 150.000 unidades. El Xsara Picasso se fabricó entre 1999 y 2012 y en su primer año de comercialización se vendieron 180.000 unidades y en sus 13 años de vida alcanzó unas entregas mundiales de 1,76 millones de unidades.

En 2006, el C4 Picasso hizo su entrada en la gama de monovolúmenes de la compañía del doble chevron con una versión larga de siete plazas inédita y con una versión corta de cinco plazas que se añadió en 2007 y se fabricó hasta 2018. Un año más tarde, los monovolúmenes Xsara Picasso y C4 Picasso contabilizaron unas matriculaciones de 115.000 y 215.000 unidades, respectivamente. Concretamente, entre 2006 y 2013, se vendieron 891.000 unidades de este último.

En 2009, C3 Picasso, el 'Space Box' de Citroën, se añadió a C4 Picasso ampliando, de este modo, la gama de monovolúmenes. Este modelo dejó de fabricarse en 2019, después de que salieran 657.807 unidades de las cadenas de montaje de la fábrica eslovaca de Trnava.

La generación actual del C4 se lanzó en 2013 y acumula 732.000 vehículos vendidos. Las ventas se mantuvieron estables entre 2014 y 2017 con un ritmo de alrededor de 120.000 ventas anuales hasta la llegada del todocamino C5 Aircross y el fin de la producción de la versión compacta de cinco plazas.

Nuevos paros de producción

Una decisión la de dejar de producir el Gran C4 que llega en una semana en la que la factoría viguesa ha vuelto a parar su actividad este pasado lunes y martes, según ha informado la compañía. Así, el Sistema 1 de la fábrica detuvo su producción el lunes y el martes en todos los turnos. La previsión actual es que se reinicie el ensamblaje de vehículos en dicha línea, donde se montan los Peugeot 301 y 2008, y el Citroën C-Elysée, a partir del hoy miércoles 27.

Por su parte, el Sistema 2 de la planta de Balaídos, donde se producen en su mayor parte las furgonetas de las diferentes marcas del grupo, también tuvo que detener todos sus turnos el lunes y el martes. Sin embargo, la multinacional está trabajando en la posibilidad de fabricar a partir de hoy miércoles solo el modelo C4 Picasso.

Según ha explicado Stellantis Vigo, estas paradas se han debido a "causas de fuerza mayor" a consecuencia de la falta de aprovisionamientos. La fábrica lleva sufriendo esta situación varios meses debido a la escasez de chips semiconductores. Sin embargo, la guerra de Ucrania ha provocado que ya falten otros componentes necesarios para sus vehículos. De esta manera, la factoría ha tenido que parar y arrancar en innumerables ocasiones, llegando a estar varias semanas sin actividad. En esta ocasión, el paro solo ha durado dos días.