El Gobierno está trabajando en una batería de medidas para rebajar la factura de la luz a partir de enero entre las que diseña un nuevo paquete fiscal que adaptar el vigente hasta 31 de diciembre a las nuevas necesidades de 2022. Así lo ha trasladado la vicepresidenta tercera para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la rueda posterior al Consejo de Ministros en la que ha aprobado el PERTE del hidrógeno verde, y cuando se prevé que el precio de la luz alcance mañana el nuevo récord de 291,73 euros el megavatio hora (MWh).
Preguntada por este asunto, Ribera ha trasladado que el Gobierno tiene el paquete fiscal encima de la mesa pero que se adaptará a las nuevas necesidades temporales, cuando se prevé que el mercado se empiece a normalizar en mayo. En este sentido, fuentes del Ministerio de Transición Ecológica han explicado que la rebaja de este año ha sido muy potente porque parte de ella se ha aplicado desde septiembre. El nuevo paquete estaría en vigor en principio hasta abril y podría reducir su impacto incluso descontando los efectos temporales dado que no habría el compromiso de concentrar en el final del ejercicio el impacto para todo el año. La rebaja de este año es de unos 2.000 millones durante seis meses y sería de unos 4.000 millones en el año entero. Hasta abril, se estudia una reducción de cerca de 1.200 millones, que podría entrar en vigor el 1 de enero o hacerlo algo más tarde con efecto retroactivo.
En julio, entró en vigor la rebaja del IVA de la factura de la luz del 21% al 10%, que supone unos 142 millones al mes. Lo hizo junto con la supresión del impuesto a la generación eléctrica, que le cuesta al Estado cerca de 90 millones al mes. A esto se sumó la rebaja del Impuesto Especial a la Electricidad, con una disminución del tipo desde el 5,11% hasta el 0,5%, medida en vigor desde el 16 de septiembre, que en medio mes recaudó 72 millones, con los que supone 144 millones al mes y plantea la necesidad de compensar a las comunidades autónomas.
El efecto retroactivo que ha mencionado Ribera sólo podría aplicarse al impuesto a la generación, que se considera directo, pero no al IVA y al Impuesto Especial a la Electricidad, que son indirectos.
Los últimos datos conocidos de impacto recaudatorio son que la rebaja del IVA y del Impuesto Especial han supuesto al Estado 334 millones de euros de los 640 previstos hasta octubre. Así lo muestra el Informe de recaudación de octubre que elabora la Agencia Tributaria (AEAT), que detalla que detalla ques 262 corresponden a la reducción del tipo del IVA desde el 21% al 10% a determinados consumos (básicamente los domésticos) y 72 millones a la disminución del tipo desde el 5,11% hasta el 0,5% en el Impuesto sobre la Electricidad, medida en vigor desde el 16 de septiembre, es decir, que el impacto se refiere tan solo a la mitad de un mes.
En cuanto al efecto de la reducción del IVA, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, lo estimaba en 857 millones hasta 31 de diciembre, lo que supondría unos 142 millones al mes. Todos ellos deberían suponen una merma de las arcas publicas de entre 1.800 y 2.000 millones entre julio y 31 de diciembre.
Holgura presupuestaria
El Gobierno ha mantenido encima de la mesa mantener estas medidas en 2022. Así lo indicó Montero en la presentación del proyecto de Presupuestos del Estado para 2022, al avanzar que el Ejecutivo tiene "holgura" para acometer una prórroga de la rebaja del IVA, el Impuesto especial Eléctrico, así como el impuesto de generación que abonan las compañías.
Montero no descartó esta posibilidad, a pesar de que supone una merma de los ingresos del Estado. "La recaudación puede comportarse incluso mejor de lo previsto y hay holgura tanto en ese sentido como en un posible menor gasto en intereses de la deuda", explicó en el Congreso. Los datos de recaudación son es estos momentos todavía mejores, con alzas del 10% y del 4% respecto a 2019.
