La economía española creció más de lo esperado en el primer trimestre. El Producto Interior Bruto (PIB) avanzó un 0,8% entre enero y marzo, sumando una décima más a la que había pronosticado el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el avance publicado a finales de abril. Los datos revelan el buen comportamiento de la economía, que reflejó un ritmo ligeramente superior al del último trimestre de 2023.
El consumo privado y la inversión han sido claves en el crecimiento, a las que se suma el tirón constante del sector turístico. Según precisa el INE, en la revisión del PIB ha influido el mejor comportamiento de la demanda nacional, que contribuyó con 0,3 puntos (una décima más de lo esperado) al crecimiento intertrimestral del PIB. Por su parte, la demanda externa aportó 0,5 puntos. Esta evolución ha permitido que la economía crezca al mayor ritmo desde el segundo trimestre de 2022. En términos anuales, el PIB avanzó un 2,5%, encadenando 12 meses consecutivos al alza.
Según la estadística del INE, el gasto en consumo final de los hogares aumentó un 0,4%, mientras que el de las Administraciones Públicas se redujo un 0,6%. Paralelamente, la inversión (formación bruta de capital) registró una variación del 1,1%, superior en 1,1 puntos a la del trimestre anterior.
El Insitituto destaca que "tanto las exportaciones de bienes y servicios (3,3%) como las importaciones (2,2%) registraron tasas positivas". Por el lado de la oferta, todos los grandes sectores presentaron una evolución favorable. Así, las ramas industriales crecieron un 1,5% intertrimestral. Dentro de las mismas, la industria manufacturera se aceleró un punto, hasta el 2,2%. Por su parte, la construcción aumentó un 1,8% intertrimestral, seis décimas más que en el trimestre anterior. Y los servicios avanzaron una décima más, hasta el 0,3%.
Menos horas trabajadas
Según el INE, el número de horas efectivamente trabajadas aumentó un 1,3% interanual entre enero y marzo, un punto menos que en el trimestre precedente. El comportamiento fue peor en términos intertrimestrales, al presentar una caída del 0,3%. También descendieron cinco décimas los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (-0,1%.).
En el mismo periodo, sufrió un descenso la productividad, medida por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo. En concreto cayó un 0,8% en el primer trimestre, en términos interanuales y encadena cuatro trimestres seguidos en negativo.
En cuanto a las rentas, la remuneración de los asalariados creció un 8,3% en tasa interanual. En tasas intertrimestrales, la remuneración total aumentó un 2,9%.