Uno de cada cuatro millones del rescate de 53 millones que el Gobierno ha concedido a Plus Ultra irán a parar a empresas vinculadas al chavismo. Tras recibir el balón de oxígeno de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), la aerolínea pagará deudas con la petrolera venezolana PDVSA y con dos prestamistas de Panamá y Suiza que tienen negocios con el Ejecutivo de Nicolás Maduro.
Estos compromisos pendientes de pago superan los 14 millones de euros y representan alrededor del 27% del dinero inyectado por el Estado en Plus Ultra.
Por un lado, tal y como desveló Vozpópuli, la aerolínea desembolsará 6,1 millones de euros a PDVSA este mismo año, en 2021, nada más recibir los préstamos del Gobierno de Pedro Sánchez. Así lo refleja la propia Plus Ultra en uno de los documentos enviados a Daiwa Corporate Advisory, el asesor financiero que ha contratado la SEPI para este rescate.
El asesor del Gobierno comenta en el informe enviado a la entidad dependiente del Ministerio de Hacienda que para reiniciar la operativa, la compañía debe liquidar previamente las deudas asumidas con distintos proveedores, entre los que está la petrolera.
Sólo el pago de esta deuda en concepto de abastecimiento de "combustible" representa el 12% de los 53 millones que ha recibido. La pública PDVSA es dueña de todas las reservas petrolíferas del país caribeño e históricamente ha sido el mayor foco de corrupción del chavismo. Su nombre sigue apareciendo en mal lugar en numerosos informes de transparencia internacional.
Plus Ultra: entre Suiza, Panamá y Venezuela
Además de pagar sus deudas con la petrolera controlada por el Ejecutivo de Nicolás Maduro, la aerolínea también pretende destinar 1,7 millones de euros a dos prestamistas afincados en Panamá y Suiza con los que suscribió préstamos puente antes del rescate y que también están asociados, de una manera u otra, con el chavismo.
En concreto, entre octubre de 2020 y enero de 2021, la aerolínea recibió préstamos por valor de 1,3 millones desde tres fondos gestionados por un inversor suizo llamado Simon Leendert Verhoeven, tal y como ha desvelado este periódico. Este empresario ha tenido negocios con la petrolera Esvenca, vinculada a Víctor Vargas, también conocido como el 'banquero de Chávez'.
Plus Ultra también debe 6,7 millones a un banco panameño que tiene inversiones en la petrolera de Venezuela
Además, en enero de este año, Plus Ultra también percibió 450.000 euros del banco panameño Panacorp Casa de Valores, que tiene inversiones por valor de 9,3 millones en Venezuela (tanto en PDVSA como en la República Bolivariana de Venezuela) y está vinculado a Camilo Ibrahim Issa, un magnate venezolano cercano a la vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez. Este empresario fue accionista de Plus Ultra en 2017.
En los contratos con el inversor suizo y el banco panameño, la aerolínea se compromete a devolver los préstamos justo después de recibir los fondos de la SEPI; en concreto, en los cinco días posteriores al ingreso del dinero público. Esos préstamos tienen un interés anual del 9% y una comisión de establecimiento del 2%. Además, si no paga a tiempo, se aplicará un interés de demora del 1% a la cantidad vencida y no satisfecha.
Finalmente, con Panacorp ya arrastraba una deuda de 6,3 millones de euros desde 2017 y prorrogado hasta 2026. En el contrato con la SEPI, la aerolínea se comprometió a no liquidar esta deuda antes de devolver los 53 millones; pero lo cierto es que, según se desprende de la documentación entregada por la aerolínea, ésta mantiene 4 millones indisponibles en una cuenta bancaria como garantía de que lo devolverá.
Otras deudas a pagar en 2021
Dentro de las prioridades a pagar durante el año 2021, la compañía aérea señala en sus documentos internos otras deudas más allá de la contraída con PDVSA. Según Plus Ultra, la empresa está planificando el pago a la petrolera venezolana, pero no tiene "la certeza de la posibilidad de materializarlo".
En concreto, la aerolínea informó a DC Advisory de su intención de abonar siete millones de euros en arrendamientos operativos; 2,2 millones en mantenimiento; 3,3 millones en gastos operativos; 2 millones en préstamos; medio millón en distribución y 400.000 euros en seguros.
El resultado final de la suma de estas cantidades a los 6,1 millones que Plus Ultra pretende destinar a PDVSA por combustible asciende a 21,5 millones de euros. Es decir, la empresa reconoce al asesor financiero una deuda a pagar de 21,5 millones en 2021, lo que supone el 40% de los 53 millones del rescate solicitado a la SEPI.