El sector turístico vuelve a revisar sus previsiones para el año 2020, lastrado por la pandemia de la covid-19. A mes de octubre, la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) prevé unas pérdidas de 106.000 millones de euros, con un retroceso a los niveles de 1995.
En agosto la patronal turística Exceltur calculaba que se cerraría el año con una caída en la actividad de alrededor de 98.000 millones de euros, pero "a la vista de las circunstancias", se han sumado 7.500 millones más respecto a esta estimación.
"Estaremos situados en los niveles de 1995, sin descontar la inflación y sin tener en cuenta que la capacidad de oferta de entonces no era ni de lejos la actual, con lo cual el impacto es muchísimo más doloroso y grave ahora", ha explicado el vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda.
La actividad turística ha sufrido un desplome del 70% respecto a la temporada alta del año pasado, con un fuerte impacto también en el empleo: a principios de octubre todavía había 595.000 trabajadores afectados, con 281.000 afiliados menos que en 2019 y 315.000 personas en un Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
Según los datos aportados por Exceltur, actualmente el 42% de los en ERTE corresponden al sector turístico. Esto se debe, fundamentalmente, al desplome de la demanda extranjera en verano, "prácticamente inexistente", lamenta Zoreda. Según los datos del INE, en julio y agosto llegaron un 84% de viajeros menos de otros países.