El sector hotelero lleva semanas con los establecimientos cerrados y sin reservas ni ocupación por la crisis sanitaria del coronavirus. Y este sector, así como el resto de negocios vinculados al turismo, teme una recuperación lenta en su actividad aún cuando se supere la pandemia en España. De hecho, las previsiones han ido empeorando a medida que se han alargado las medidas de confinamiento en el país por el decretado estado de alarma.
La patronal turística Exceltur estima que se perderán alrededor de 55.000 millones de euros, pues la actividad durante los meses de verano será baja respecto a otros años y los niveles pre Covid-19 no se recuperarán hasta al menos el mes de septiembre u octubre. Lejos se quedarán, según sus cálculos, de los 12 millones de viajeros de media que pasaron por los hoteles españoles en la temporada estival del pasado año.
En este sentido, los sindicatos advierten que la mayoría de estas empresas preparan ya Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs) ordinarios y de mayor duración que, de aprobarse, sucederán a los presentados inicialmente por fuerza mayor, que finalizarán cuando cese el estado de alarma el 26 de abril. "Nos consta que todos los grupos hoteleros grandes están trabajando en ellos, va a haber una avalancha", asegura a Vozpópuli el responsable nacional de Hostelería y Turismo de CCOO, Gonzalo Fuentes.
Algunas empresas del sector reconocen en conversaciones con este medio que están estudiando esta medida adicional ante la incertidumbre de cuándo volverán a operar los hoteles y se recuperarán los clientes. "Hay que tenerlo previsto para que los empleados no queden desprotegidos en ningún momento", indican las mismas fuentes. Tras finalizar la presentación de los expedientes por fuerza mayor, los equipos de abogados de las hoteleras se vuelcan ahora en el estudio de ERTEs por causas productivas.
Estos segundos tardan más tiempo en tramitarse, por lo que fuentes de las empresas indican que lo que se busca ahora es agilizar los plazos para que cuando acabe el primer ERTE, con el final del estado de alarma, se haya avanzado en las negociaciones con los sindicatos y se pueda aplicar esta segunda suspensión temporal de empleo a la plantilla. Una vez constituido el comité de empresa, la empresa comunica formalmente a la autoridad laboral el inicio del periodo de consultas, que durará como máximo 15 días.
Buscan un acuerdo colectivo
Desde CCOO asumen que "hacen falta ERTEs en los hoteles, porque si no habrá EREs o cierres definitivos", pero temen el caos que supondrá negociar de forma individual y "en apenas dos semanas" los "cientos de miles" de despidos temporales que se han aprobado hasta ahora por fuerza mayor. Por eso, Fuentes explica que están buscando un "acuerdo colectivo" con las patronales del sector, con las que están ya en conversaciones
Los sindicatos piden que se "paren los ERTEs por causas productivas" hasta que haya un "marco regulador" por parte del Gobierno con una serie de condiciones homogéneas para el conjunto del sector: que incluya a los trabajadores fijos discontinuos y eventuales; que se establezca la apertura de hoteles y la incorporación de plantillas progresiva según se vaya recuperando la ocupación; y que la empresa está exonerada de pagar las cuotas sociales, como en los ERTEs por fuerza mayor, para ayudar al sector.
Las agencias de viajes
Sin embargo, algunas agencias de viajes ya han dado los primeros pasos para suspender temporalmente los empleos cuando finalice el estado de alarma. World2Meet (W2M), la división de viajes del grupo Iberostar, que emplea a alrededor de 800 personas; Viajes El Corte Inglés y Globalia ya ha comunicado a los sindicatos su intención de realizar un ERTEs por causas productivas y que sucederán a los de fuerza mayor, tal y como ha avanzado Vozpópuli.
Desde las compañías confirman a este medio que ya se han establecido los primeros contactos con los sindicatos para constituir el comité de empresa y comenzar las negociaciones. En este sentido, aún se desconocen las condiciones de las medidas, como a cuántos empleados afectará o su duración.
Fuentes sindicales indican a este medio que también "ha mostrado intención" de hacer un segundo ERTE en la firma catalana BestTours, con alrededor de 80 empleados, a la que Trabajo ha denegado los despidos temporales por fuerza mayor; así como en la tercera compañía más grande de la industria de los viajes, Ávoris, perteneciente al grupo Barceló. La división de viajes también ha presentado ya uno por fuerza mayor para la totalidad de la plantilla, compuesta por alrededor de 3.500 empleados.
