Economía

La compra en casa en 10 minutos: la nueva batalla de los súper fantasma

Colette trabaja como 'rider' en el centro de Madrid. Cada día, se monta en su bicicleta con un objetivo: entregar la compra al cliente en apenas 10 minutos. Colette no

Colette trabaja como 'rider' en el centro de Madrid. Cada día, se monta en su bicicleta con un objetivo: entregar la compra al cliente en apenas 10 minutos. Colette no reparte para Mercadona, DIA o El Corte Inglés. Tampoco para Glovo o Amazon. Trabaja para Gorillas, una 'dark store' alemana que comenzó a operar en la capital en junio. Un súper online, sin tienda física, pero con despensas repartidas por la ciudad que abastecen los pedidos de los clientes. Al igual que Gorillas, startups como Dija y Blok han irrumpido en los últimos meses en España para hacerse un hueco en el sector de la distribución a golpe de pedidos ultrarrápidos.

Los 'dark store' o 'dark super' son algo parecido a las 'dark kitchen' que utiliza la hostelería. Los supermercados fantasma no tienen tienda física ni clientes ni cajas registradoras. Al menos, no como las que conocemos. Son más bien despensas que almacenan los productos de la cesta de la compra. Los mozos de almacén preparan los pedidos y los 'riders' los llevan a los clientes.

En España, las 'dark store' se han popularizado gracias a las restricciones de movilidad impuestas durante la pandemia. Grandes superficies como Mercadona, DIA o El Corte Inglés tienen sus propias 'tiendas oscuras' para agilizar el reparto de pedidos online. Glovo, especializada en el 'delivery' hostelero, también tiene locales para guardar artículos de la compra que luego distribuyen sus repartidores.

Jacinto Llorca, especialista en marketing y retail, cree que la entrada de estas nuevas compañías casi al mismo tiempo "ha pillado por sorpresa" al sector. La diferencia es que Gorillas, Dija o Blok no siguen la evolución 'online' de Mercadona y otros supermercados clásicos. Las tres firmas han empezado directamente como plataformas telemáticas, nada de tiendas físicas. "Una expansión con modelo startup puede ser muy rápida. No necesitan acondicionar locales, pueden hacer aperturas ultrarrápidas. En distribución tradicional todo es mucho más lento, de un año para otro", explica Llorca en declaraciones a Vozpópuli.

Las 'dark store' montan sus almacenes en plena ciudad. Evitan así trayectos más largos desde polígonos industriales de las afueras

Las tres compañías tienen pocos meses de vida. Su principal virtud es la velocidad. Las tres tecnológicas prometen entregar sus pedidos en 10 minutos. Para cumplir estos plazos, montan sus almacenes en plena ciudad. Cada centro logístico abastece los pedidos de un área urbana concreta, ya sea un barrio o un distrito. Trabajan directamente en lo que en el argot logístico se conoce como la 'última milla', es decir, el último viaje que realiza una mercancía hasta su destino final. Evitan así trayectos más largos desde polígonos industriales de las afueras.

La británica Dija comenzó su actividad en marzo en Londres. En España arrancó en abril. Cuenta con más de 100 empleados y seis pequeños centros de distribución en Madrid con las que cubre el 90% del área metropolitana de la capital. Próximamente llegará a Valencia, Barcelona, Málaga y Sevilla, según Alimarket.

La alemana Gorillas desembarcó en la capital en junio, pero ya reparte en Barcelona, Valencia, Alicante, Málaga, Marbella y Mallorca. En Madrid sólo abarca los distritos de Centro, Tetuán, Chamberí y Salamanca. Colette, por ejemplo, sólo reparte por las calles de este último distrito. Utiliza una bicicleta eléctrica y viste el color negro de la empresa. Cuenta que antes de trabajar con Gorillas pasó por otras conocidas plataformas de 'delivery'. Ahora está más contenta porque el "trato" que le da la firma alemana no tiene "nada que ver" con el que recibió como 'rider' en las anteriores empresas.

El proceso de pedido en Gorillas es muy parecido al de los servicios online de cualquier negocio de consumo: basta con descargarse la app, registrarse e introducir un método de pago. Después de marcar tu ubicación, la aplicación te enseña sus productos por categorías: frutas, verduras, barbacoa, recetas, helados, carne y charcutería, snacks y frutos secos… Los productos se seleccionan por unidad y se van añadiendo a la cesta. Una vez que se realiza el pago, el tiempo de espera empieza a correr. El precio incluye el valor de los productos y la tarifa de envío. La plataforma reparte todos los días de la semana de 8 a 23 horas.

La otra startup, Blok se creó en enero en Barcelona. Sus planes son terminar 2021 con 10 almacenes propios en la capital catalana y otra decena en Madrid. En julio, sin embargo, la tecnológica turca Getir compró la empresa catalana.

De hipermercados a 'colmenas'

La irrupción de estas compañías se explica gracias a los hábitos de consumo que moldeó la pandemia. Según Kantar, el sector del gran consumo cerró 2020 con un crecimiento del 12,7%, impulsado por los cierres y las restricciones en la hostelería. Mercadona mantuvo su liderazgo indiscutible en el ránking de los supermercados con más peso en España, seguida de Carrefour y DIA. El imperio de Juan Roig, sin embargo, sufrió la mayor caída en cuota de mercado entre las principales cadenas. A Mercadona le perjudicaron sus problemas para atender todos los pedidos online durante el confinamiento duro y no tener tiendas de proximidad en todas las comunidades autónomas.

En los últimos años los supermercados clásicos han abierto sus propios modelos de 'dark store'. La pandemia ha acelerado este proceso. DIA cuenta ya con más de una docena de 'dark stores'. El Corte Inglés transformó una de sus tiendas en Alcalá de Henares en un almacén sólo para pedidos. Y Mercadona, por ejemplo, llama "colmenas" a sus tiendas fantasma. Al tablero hay que sumarle otros jugadores como Amazon Fresh y Glovo.

La comodidad es lo que más valora la gente y estas empresas ofrecen comodidad. No va a ser algo que atienda muchísima gente, pero va a tener su nicho"José Miguel Flavián, fundador de la consultora GM&Co

La proliferación de los súper fantasma es un fenómeno que se repite en otros países de Europa. En Reino Unido, por ejemplo, el modelo de startup de entregas a domicilio ultrarrápidas está más extendido. Además de Dija, Gorrilas o Getir, operan otras como Jiffy, Weezy o Snappy Shopper.

"Tampoco nos tiene que sorprender que sea una oportunidad de mercado", dice José Miguel Flavián, fundador de la consultora GM&Co. Este experto en el sector del gran consumo en Reino Unido hace un paralelismo con otros cambios históricos de los hábitos de consumo de la sociedad. "En los años 70 y 80 se empezaron a abrir grandes supermercados en España y la gente empezó a hacer compras más grandes y planificadas (…) Con el online está pasando algo parecido. Poco a poco, la evolución de la sociedad y de la tecnología ha ido favoreciendo compras más pequeñas (…) Con la evolución de estas necesidades y el confinamiento, han aparecido estas empresas de entrega rápida".

¿Un nicho con futuro?

Aún es pronto para valorar el impacto que tendrán estos nuevos operadores en el tablero de la distribución. Flavián, sin embargo, no cree que el de las entregas ultrarrápidas sea un nicho de mercado "muy grande". "La comodidad es lo que más valora la gente y estas empresas ofrecen comodidad. No va a ser algo que atienda muchísima gente, pero va a tener su nicho", prevé.

La entrada de estos operadores servirá para que los supermercados tradicionales aceleren sus procesos y mejoren"Jacinto Llorca, especialista en marketing y retail

Jacinto Llorca, por su parte, cree que la cuota de mercado en España de estas nuevas plataformas podría "ser testimonial durante mucho tiempo". "Esto va a servir para incentivar la transformación digital, tanto la apuesta online como la última milla. La entrada de estos operadores servirá para que los supermercados tradicionales aceleren sus procesos y mejoren", sentencia.

En Gorillas, que nació en marzo de 2020 en Alemania, son optimistas. "No sólo creemos que hay espacio suficiente para todos en el mercado español, confiamos en que el viraje en los hábitos de compra de los consumidores será tan fuerte, que cabe la posibilidad de que todas las plataformas de entrega a domicilio existentes no sean suficientes para atender las necesidades de un mercado que cada vez demanda más eficiencia en los tiempos de entrega, más compromisos ambientales por parte de las empresas y mejores condiciones laborales para sus trabajadores", defienden fuentes de la compañía.

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