El gigante británico de la turoperación Thomas Cook tiene una importante presencia en los destinos de sol y playa españoles por el gran volumen de turistas británicos y alemanes que trae a nuestro país. De hecho, España ocupa el primer puesto en su ranking de mercados con más operaciones registradas para la temporada de verano.
Pero el sector turístico en Canarias y Baleares no pasa por su mejor momento. La recuperación de algunos destinos competidores del Mediterráneo como Turquía, Egipto o Túnez -con precios más bajos y una oferta muy similar- ha provocado una bajada importante en la llegada de viajeros extranjeros -principalmente alemanes, nórdicos y británicos- a nuestras islas.
Las aerolíneas han avivado el fuego al reducir el número de plazas en sus vuelos a Canarias para reforzar las conexiones con ciudades turcas como Antalya y Marmaris, según avanzaba este medio hace unas semanas y ha confirmado la patronal hotelera Cehat. Además, la guerra de precios de las compañías aéreas 'low cost' ha hecho que los visitantes disminuyan el número de días en la estancia, al no sentir la obligación de amortizar el billete.
Pese a esto, en el informe vacacional de 2019 realizado para orientar a sus clientes, Thomas Cook no dedica ni una línea a estimular el apetito de los británicos por España y centra todos sus esfuerzos en promocionar los viajes a Turquía y Túnez, donde el negocio de la empresa mayorista está creciendo desde el pasado año.
Thomas Cook está "presionando" a los hoteleros de Canarias y Baleares para que bajen los precios ante la competencia de estos países
Turquía ha subido este año un escalón en su lista de destinos más populares y ahora ocupa la segunda posición, sólo por detrás de España y superando a Grecia. "En 2019 Turquía alcanza un nuevo pico, con un aumento del 27% hasta febrero en las reservas solo del vuelo, en comparación con el verano pasado", señala el turoperador en el informe realizado para orientar a sus clientes.
Además, asegura que "alcanzaría la primera posición si no fuera porque España, Canarias y Baleares se agrupan en la misma categoría". Según dice "aparte de su atractivo por estar fuera de la Unión Europea, Turquía es un punto de interés turístico gracias a la excelente relación calidad-precio que ofrecen sus resorts de cinco estrellas".
Thomas Cook vende Turquía a los turistas como "playas de arena perfecta, montañas nevadas, lagos de sal, ruinas antiguas lagunas azules y bazares nocturnos". Además, también destaca su gastronomía, uno de los puntos fuertes de España: "Las fértiles tierras de Turquía hacen que abunden los productos frescos que llegan a los platos de los turistas, tanto dentro como fuera de los hoteles", señala.
Dispara su negocio en Túnez
El incremento interanual del negocio de Thomas Cook en Túnez es aún mayor, pasando de ocupar la décima posición en 2018 a la séptima este año. La compañía explica que hasta 2014, antes de los ataques terroristas en Sousse, Túnez era "el tercer destino más popular" entre sus clientes ingleses, con medio millón de viajes contratados al año.
Ahora este destino demuestra síntomas de recuperación gracias "al poder adquisitivo de los visitantes británicos" y "al cambio en los consejos de viaje de la Oficina de Relaciones Exteriores" del país. "La compra de paquetes a Túnez se ha duplicado en comparación con el año pasado y las reservas de vuelos se han cuadruplicado", asegura el turoperador, en base a los datos registrados sólo hasta febrero.
Ante el aumento de la demanda en estos países en detrimento de las islas españolas, Thomas Cook está "presionando" a los hoteleros de Canarias y Baleares con los que trabaja para que rebajen los precios este verano, sobre todo en los meses de menos demanda -septiembre y octubre-, según avanzaba Vozpópuli hace unos días.
La consultora Cushman & Wakefield asegura que los hoteles de Canarias y Baleares ya han bajado sus precios en los primeros seis meses del año, dañando su rentabilidad. Sobre este punto incide la patronal hotelera Cehat, que prevé un verano con la rentabilidad más baja de los últimos años. Según dice, se situará en el 40,81%, frente al máximo del 95,45% alcanzado en la época estival de 2017.