El fondo americano Värde Partners ha decidido desprenderse de su parte en la socimi de oficinas de La Finca tras llegar a un acuerdo por 130 millones con su principal accionista, Susana García-Cereceda. La operación deberá formalizarse dentro de un mes, el próximo 15 de febrero.
Värde llevaba casi dos años intentando salirse de la división de oficinas de la promotora de la urbanización de lujo, en la que entró en diciembre de 2016 por algo más de 100 millones de euros por su 38%. La socimi hoy capitaliza alrededor de 160 millones y la participación de Värde vale unos 60 millones. En el primer semestre de 2021, la inmobiliaria registró una cifra de negocio de 22 millones, de los que 18 millones procedían de arrendamientos.
Desde finales de 2019, el objetivo del fondo ha sido el de recuperar su inversión inicial con una plusvalía, pero las ofertas que le llegaban apenas superaban o estaban por debajo de la cifra que había invertido inicialmente, o venían de inversores que no eran del agrado de Susana García-Cereceda, la accionista mayoritaria que heredó la compañía de su padre, Luis.
Entre finales de 2020 y principios de 2021, el fondo recibió ofertas por, al menos, entre 100 y 110 millones de euros que venían de inversores potencialmente incómodos para el control de la mayor de las Cereceda.
Las partes sellaron un acuerdo de divorcio en marzo de 2021 que se terminaría de saldar con la operación conocida este martes, por un total de 130 millones, de los que dos millones están sujetos a objetivos de resultados de la promotora.
Caso Villarejo en La Finca y acuerdo de divorcio
Värde no ha sido capaz de cumplir su hoja de ruta ideal alrededor de la promotora de lujo en la que entró en 2016. El factor reputacional del juicio a su principal accionista, la propia Susana García-Cereceda, por haber contratado al excomisario José Manuel Villarejo para espiar y perjudicar a rivales en favor de cuestiones relacionadas con la compañía, ha complicado sobremanera los planes de los americanos.
El fondo llevaba ya casi dos años intentando desprenderse de su participación, coqueteando con ofertas que solo le darían plusvalías de apenas el 10% -algo sorprendente en un fondo de estas características-. En una comunicación al mercado de valores, Värde llegó a mostrarse dispuesto a dar salida a sus acciones con un mensaje al mundo inversor: estaba 'atrapado' en la promotora.
En esa comunicación, Värde informaba de los términos del divorcio pactado en marzo de 2021 con la mayor de las Cereceda. Esta iba a poder acabar comprando la participación de Värde por un precio base (superior a 55 millones) si el fondo no conseguía, en el plazo de diez meses, una oferta superior. Pero, si los americanos conseguían una oferta que no contara con el respaldo de la primera accionista podrían, una vez transcurrido ese tiempo, obligarle a esta a comprar las acciones al precio ofrecido por ese tercero.
El fondo ha conseguido finalmente una plusvalía del 25% tras algo más de cinco años en la socimi. Fuentes cercanas al lado de Cereceda inciden en que se arrancó al fondo una cesión en sus pretensiones económicas. La compañía tiene pendiente de devolución un préstamo sindicado con Allianz, Caixabank, Santander y Société Générale por cerca de 400 millones con grueso de vencimiento en 2023.