El gigante audiovisual Disney ha ganado 10.000 millones de dólares en los últimos nueve meses del año fiscal 2019. Esto supone un 2,68% menos interanual, caída que se debe, entre otras cosas, a la adquisición de los estudios 21st Century Fox el pasado 20 de marzo.
No obstante, los primeros nueve meses del ejercicio, el conglomerado The Walt Disney Company ingresó un 11,8% más, 50.470 millones de dólares, frente a los 45.128 millones de dólares que facturó el mismo periodo de 2018.
La compañía de Mickey Mouse ha hecho público el informe con sus resultados, en el que su presidente y consejero delegado de la compañía, Robert Iger, asegura que las cifras reflejan sus "esfuerzos para integrar efectivamente los activos de 21st Century Fox".
Además de esto, Iger ha querido recordar que los datos de facturación contrastan con los de la taquilla, que este año ha logrado récords y ha posicionado a una de sus películas como la más vista de la historia del cine, Los Vengadores: Endgame, que arrebató el oro al filme de James Cameron, Avatar.
El presidente del gigante audiovisual ha felicitado a la división de cine de su compañía por lograr hacerse con los 8.000 millones de dólares en venta de entradas a nivel mundial. "Un nuevo récord en el sector" que atribuye a las películas de Marvel, Pixar y Disney.
Asimismo, Disney ya ha entrado de lleno en la batalla del streaming. Recordando a tiempos en los que las televisiones comenzaban a lanzar sus canales nuevos allá por los 90, en estos tiempos las plataformas y los contenidos streaming se multiplican.
Así, Iger ha querido remarcar que Disney continúa ganando "popularidad" y que el futuro lanzamiento de Disney+ hará frente al actual rey del streaming, Netflix.
Los estudios cinematográficos, los que más crecen
El conglomerado ha dividido sus beneficios por sectores, siendo las redes mediáticas las que más ingresos lograron (un 21% más). Le siguen los parques temáticos (un 7% más) y los estudios cinematográficos (un 33%).
Además de la acogida de Avengers: Endgame (en inglés), otras cintas como Aladdin, Captain Marvel o Toy Story también argumentaron las buenas cifras de la división de estudios cinematográficos.
Sin embargo, estas cifras han sido peores de lo esperado por los inversores. Por ello, los títulos de Disney caían un 2,52% en las operaciones posteriores al cierre de Wall Street.