El pasado martes, 13, la ex ministra de Defensa Carmen Chacón cumplió años, 41 muy bien llevados, y como ese día había pleno la celebración quedó pospuesta hasta el jueves. El caso es que se sumó a la fiesta, celebrada en los alrededores del Congreso, un grupo amplio de parlamentarios, en su mayor parte del PSC. Hubo numerosos diputados que viendo el ambiente que reinó en el convite entendieron el ágape como una especie de homenaje a la candidata frustrada.
La interpretación que se dio de su fracaso nada más acabar el 38º Congreso socialista incidió en que su carrera política estaba acabada. Esta sigue siendo la lectura mayoritaria dentro del PSOE, si bien los socialistas catalanes que trabajan en la Carrera de San Jerónimo no se atreven a llegar tan lejos y señalan que, como mucho, Chacón se mantiene en una especie de stand-by, a la espera del recorrido que tenga el mandato de Rubalcaba.
Este ha sido, quizás, uno de los cumpleaños más amargos de la ex ministra, puesto que ella tenía puesta toda su ambición en poder celebrar sus 41 años como secretaria general del PSOE, desde el timón de Ferraz. Pese a todo, los suyos no la abandonan.