Los arquitectos de Madrid más activos en Twitter han rebautizado a la Puerta del Sol como Puerta del SOHL, ya que consideran que OHL, la empresa de Villar Mir, está teniendo cada vez más peso en la Casa de la Villa que gobierna Ana Botella. De hecho, temen que el concurso de ideas para reforma de la Puerta del Sol esté influenciado por Villar Mir y su gente. 
 
Y eso que OHL no está teniendo suerte con las obras en la Comunidad de Madrid. La operación Canalejas no podrá construir el intercambiador de transportes prometido por problemas técnicos. Miles de personas han firmado contra la reforma de Canalejas porque consideran que no se van a respetar algunos elementos arquitectónicos singulares del edificio que fue del Banco Central.
 
Además, Villar Mir tiene un grave problema con la quiebra de la autopista M-12 de peaje que une Madrid con Barajas. Ha sido un auténtico fracaso. Se pensó que, como en otras ciudades europeas, los automovilistas pagarían por ir al aeropuerto rápido. El tráfico aéreo ha bajado y además los ciudadanos se buscan caminos para no pagar peaje para acceder a la T4.
 
Y luego está el tren a Navalcarnero. OHL ganó el concurso y al no conseguir créditos (eso dijo) paró las obras que siguen paralizadas. Se pensó que Eurovegas salvaría el tren. El fracaso de Sheldon Adelson ha supuesto enterrar el proyecto y los 180 millones de euros que se han gastado hasta la fecha. La Comunidad negociará con OHL una salida, pero la oposición va a exigir que o se terminan las obras o se pague a la Comunidad por incumplir el contrato de concesión tal y como dicen las leyes.

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