Cómo es la fiebre lotera. Basta que haya un evento reseñable para que la cifra correspondiente a la fecha de dicho acontecimiento desate la locura supersticiosa. Una boda real, un Mundial de fútbol, una profecía maya... Cualquier cosa vale para obviar las leyes de la probabilidad y confiar en que ése número simbólico atraerá la suerte. Este Buscón, que aunque no cree en caprichos del bombo ni en coincidencias cósmicas también compra lotería de Navidad, ha sabido cuál es el último número de moda: el 46664, el número del preso Nelson Mandela. ¡Y encima capicúa!
"Desista señora, ese número está agotadísimo". Era la respuesta de la lotera de una administración madrileña a una mujer que buscaba desesperadamente un décimo del 46664 este mismo lunes. La pobre venía desde la otra punta de Madrid con la esperanza de que quedara alguno y pillar un buen pellizco gracias al mismísimo Nobel de la Paz. Solo cinco administraciones distribuyen la deseada cifra para el sorteo Extraordinario de Navidad y el del Niño: tres en Madrid, una en Huesca y otra en Murcia. Pero la suerte ya está vendida.
Mandela, que cumplió la mayor parte de su condena en la cárcel de Robben Island como el preso 466/64, convirtió ese número en todo un símbolo de la paz y la justicia social. Sirvió como emblema en campañas contra el VIH y otras iniciativas humanitarias impulsadas por el incansable 'Madiba'. El icono de la lucha contra el apartheid era conocido por todos, pero cuesta pensar que en España también lo fuera el detalle de su número de reo. De eso ya se han encargado los medios que, con documentales y películas sobre la vida de Mandela, han copado la programación desde que el pasado jueves se conociera la noticia de su muerte. Ahora ya todos somos fans de Mandela y su numeración.
¿Y si las bolas prefieren algo más español? Seguro que más de uno habrá recorrido las administraciones en busca de la fecha de la publicación del libro de Belén Esteban o hitos semejantes. De hecho, el de Mandela no es el único número agotado. Si la de la muerte del líder sudafricano es una fecha para recordar, y perdón por lo atrevido de la comparación, no lo es menos la del inolvidable discurso olímpico de Ana Botella el pasado 7 de septiembre en Buenos Aires. La alcaldesa no dio suerte a la candidatura olímpica de Madrid con su 'divertida' puesta en escena, pero ¿y si el número 70913 trae un relaxing premio?