Las plataformas vecinales Prou Soroll y Preservem Castelldefels y el Observatorio Ciudadano Intermunicipal del Medio Ambiente han decidido romper su relación con el Ayuntamiento del Castelldefels, gobernado por el PSC, ERC y Movem, porque temen que este apoye a AENA en su intención de cambiar el uso de las pistas del Aeropuerto Josep Tarradellas El Prat. Algo que estas entidades califican como un "asunto de extrema gravedad" porque incrementaría aún más los problemas de contaminación acústica y química que ya tiene el municipio debido a su cercanía al aeródromo.
El cambio de uso de las pistas pasaría por convertir dos de las tres con que cuenta el aeródromo en pistas independientes. Eso significaría que AENA podría utilizarlas en función de sus necesidades y lograría mayor capacidad operativa sin tener que hacer una gran inversión. Capacidad que, además, ya está prevista por el operador de los aeropuertos españoles en un gran proyecto que contempla, entre otros, algunos hoteles y espacios de ocio para los viajeros.
Esa ampliación de la capacidad operativa del aeropuerto barcelonés tendría graves repercusiones para los residentes en municipios como Castelldefels o Gavà, que temen que su calidad de vida se vea afectada porque un mayor número de despegues y aterrizajes supondrá forzosamente soportar más ruido.
Las tres entidades han recordado que el Ayuntamiento gobernado por Maria Miranda se vio forzado a integrarse en el Observatorio Ciudadano Intermunicipal del Medio Ambiente por la presión vecinal. Sin embargo, no han "contribuido" ni "dado paso alguno" para lograr el "consenso" con otros consistorios o instituciones. A pesar de ello, las plataformas creen que el Ayuntamiento de Castelldefels está utilizando esta entidad para "ofrecer una imagen de unidad" frente a los ciudadanos, que nada tiene que ver con las decisiones del Gobierno municipal.
Como prueba de esta utilización, las plataformas han denunciado que este observatorio no fue citado a la reunión que el Ayuntamiento mantuvo con el presidente de AENA, Maurici Lucena, a mediados del pasado mes de enero. El observatorio cuenta con un equipo técnico que, por los estatutos de la entidad, debe participar en los encuentros que mantenga el municipio con AENA para todos los asuntos relacionados con el Aeropuerto.
Presión de AENA
Las tres entidades han denunciado también que el Ayuntamiento de Castelldefels está haciendo un "uso partidista" del observatorio y del asunto de la posible ampliación de las pistas. En este sentido, han asegurado en un mensaje remitido a la alcaldesa que no ven "voluntad" ni "interés" del Gobierno municipal para aliarse con otros municipios también afectados. Y menos aún para trabajar en contra de "la lucha iniciada desde los lobbies económicos e institucionales" a favor del cambio de usos de las pistas aeroportuarias. "AENA dispone también de sus propios intereses, en tanto empresa cotizada", han advertido.
Las dos plataformas y el observatorio han señalado también que la posición del Ayuntamiento en este asunto deja entrever que el objetivo de AENA pasa por ampliar las pistas del aeropuerto y acusan a la alcaldesa de alimentar "todo tipo de especulaciones" que vienen a confirmar lo que temen estas asociaciones: "el cambio del actual uso de pistas es la opción preferente en los planes de AENA". A ello han sumado que la alcaldesa no haya convocado a estas entidades a ningún encuentro tras el anuncio por parte de AENA, el pasado mes de marzo, de poner en marcha el proyecto de la terminal satélite.
Sin posición clara
Desde AENA y a preguntas de El Liberal, no han querido desvelar aún cuál será, finalmente, la decisión sobre el Aeropuerto Josep Tarradellas El Prat. "Hemos abierto una ronda de reuniones con los municipios", han explicado, "y, cuando se acaben, daremos a conocer nuestra postura en unas semanas". No obstante, han asegurado que, en estos momentos, "no hay una posición fijada", aunque tampoco han aclarado si los encuentros se están celebrando para informar a los ayuntamientos de los planes definitivos o solo para consultar su opinión.