Miquel Iceta sale al paso de la polémica suscitada por proponer la "flexibilización de la inmersión lingüística" en Cataluña. Para el líder del PSC, no se abandona el modelo, sino que permita una castellanización en las zonas donde el catalán es más utilizado y viceversa.
"Hay partidos que han renunciado a mejorar la escuela porque consideran que vivimos ya en el paraíso", ha afirmado el primer secretario de la formación catalana. "Hay que seguir mejorando", ha advertido, para defender acto seguido que sean los profesores quienes decidan cómo hacerlo y marcar la pauta. "Hay zonas que pueden necesitar un refuerzo del catalán, otras del castellano y todas del inglés", ha afirmado tras depositar el voto a favor de un Gobierno de coalición con Unidas Podemos.
El PSC ha incluido esta reforma en la ponencia de su 14 Congreso, que se celebrará a mediados de diciembre. El texto se ha visto como una opa a Ciudadanos ya que por primera vez se plantean modificar la inmersión lingüística tras 40 años de implantación.
30 años de imposición del catalán
El documento estipula que se ha roto el acuerdo alcanzado hace 30 años ya que se utiliza la lengua como un arma política por parte del nacionalismo. "El proceso independentista ha asociado el catalán a su causa, y por una utilización partidista alrededor de su uso, especialmente en la escuela", ha indicado. De esta forma, la lengua se ha convertido en un "riesgo de división social".
El PSC, que estuvo al frente de marchas en defensa de la inmersión lingüística, pasa a defender ahora un modelo trilingüe en la escuela. El propio Iceta ha afirmado que "comparte" el modelo actual de la imposición del catalán, única lengua vehicular en la escuela, y que relega al castellano a lengua extranjera, al estudiarse entre dos y tres horas a la semana dependiendo del curso.
En 2016, el último congreso del PSC, definía el catalán como "lengua vehicular" en los colegios, con un compromiso explícito a "consolidar el sistema de inmersión lingüística que garantice un solo modelo de sociedad con igual acceso al conocimiento, potenciando en cada caso la lengua o las lenguas que más haya que reforzar".
Sentencias judiciales contra la inmersión
Este modelo lingüístico, denominado como un "éxito" por parte de los independentistas y catalanistas, es único en el mundo, donde en una parte de un país no se utiliza la lengua oficial del país para impartir las clases. De hecho, todos los tribunales de justicia, pasado por el Constitucional, Supremo y Superior de Justicia de Cataluña han sentenciado en reiteradas ocasiones contra este modelo.
En 2014, tras una sentencia del Supremo, el TSJC falló a favor de imponer el 25% de las clases al menos en castellano, pero nunca se ha llegado a aplicar esta medida por parte de la Generalitat. El Tribunal Constitucional ha declarado este modelo inconstitucional, pero aún así aún perdura.