El Mobile World Congress (MWC), la feria tecnológica más importante del mundo, se ha convertido en el objetivo de sindicatos y taxistas para presionar al Ayuntamiento de Barcelona y a la Generalitat, respectivamente, en los últimos años. El pasado año, el taxi de Barcelona iniciaba una movilización masiva contra las VTC, que acabó con una huelga indefinida de cinco días.
La amenaza de dejar sin transporte público a Barcelona entre el 24 y el 27 de febrero se concretará este lunes, con paros parciales y una huelga de 24 horas en plena feria tecnológica, según han asegurado fuentes sindicales a El Liberal.
Los sindicatos denuncian la "pasividad" de TMB
Como en las anteriores convocatorias de huelga, el Transporte Metropolitano de Barcelona, dirigido por Gerardo Lertxundi, ha decidido realizar las mismas declaraciones que hace un año y "no ve ningún motivo" para paralizar el transporte público de la Ciudad Condal. Tampoco ve "ruptura" en el diálogo con los sindicatos.
Sin embargo, los agentes sociales han cargado contra la "desidia y la pasividad" de Lertxundi, de quien dudan que esté capacitado para dirigir una plantilla de más de 9.000 empleados y un presupuesto de 223 millones en nóminas, de los cuales 196 se destinan a los cerca de 1.400 empleados de la sede corporativa, una media de 143.000 euros por persona, según las cifras que manejan los sindicatos. También han criticado que el nuevo consejero delegado se haya subido el sueldo un 40%, hasta los 155.000 euros, "sin tener idea de gestionar".
Contratos precarios de una semana
Entre los motivos de la huelga de autobuses se encuentra el alto porcentaje de absentismo laboral, que los sindicatos cifran en un 20%, ante la falta de vehículos. También han asegurado que se está incumpliendo los tiempos de frecuencia, que deberían ser de entre cinco y ocho minutos entre las 7.00 y las 21.00 horas, mientras que el 15% de los contratos de la plantilla son "precarios". "Hay contratos que tan solo duran una semana", según las fuentes consultadas por este diario, en otros casos solo se realizan firmas para el fin de semana.
Los representantes de la plantilla han asegurado que Lertxundi da largas a la negociación del nuevo convenio, mientras ya se ha sentado con los representantes del Metro, cuyos sindicatos rechazan ahora la huelga.
"Queremos negociar y firmar el nuevo convenio", han afirmado las mismas fuentes, pero advierten del riesgo de que la situación se enquiste. "Nos encaminamos a la situación en Francia", cuyo transporte está paralizado desde hace 37 días.
El Taxi, a la espera, pero con la amenaza de huelga
El taxi, por su parte, prosigue con su negociación con la Generalitat con la amenaza de bloquear Barcelona durante el Mobile World Congress. Liderados de nuevo por Alberto Álvarez, 'Tito', y el sindicato Élite Taxi, estos conductores con licencia y asalariados exigen al consejero de Territori, Damià Calvet, que se sancione a las plataformas de VTC por no respetar los 15 minutos de espera, así como a los conductores de VTC que realizan esperas fuera de las bases establecidas, como ocurre en el aeropuerto de El Prat.
Por ahora, las negociaciones están en un compás de espera hasta el próximo 21 de enero, día en el que volverán a reunirse la Generalitat, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y los taxistas, que han desconvocado su reunión prevista para el próximo 13 de enero. Álvarez ha arrancado a la Generalitat un calendario para entablar las conversaciones, pero mantiene la amenaza de una huelga de cara a la feria tecnológica.
Para los taxistas, las VTC deben llevar una pegatina distintiva y número de licencia visibles, tal y como ocurre en Madrid, para detectar si los vehículos privados cumplen con el descanso establecido durante el fin de semana y días de diario. También han exigido que el Ministerio de Fomento y la Generalitat implemente el sistema electrónico de los trayectos realizados por las VTCs.