Pese al ruido de tambores, las cosas siguen en su sitio en Ciudadanos. Aparentemente. La última andanada lanzada por el sector crítico para “democratizar el partido” apenas si ha hecho un ligero arañazo al sólido Consejo General, de marcado carácter continuista. El colectivo que lidera el vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, ha presentado una enmienda de devolución para intentar darle la vuelta a la Ponencia de Estatutos elaborada por la estructura oficialista de Cs, y que otorga todo el poder al presidente del partido. Pero ha hecho aguas. Pero todavía no se ha dicho la última palabra. Las diferentes corrientes críticas (que desean un partido organizado "de abajo a arriba", y no de arriba a abajo como ahora) van a presentar enmiendas a la totalidad de los estatutos.
Lejos de lograr sus objetivos, los críticos ha sufrido un importante revés: 103 votos en contra, cinco a favor y dos abstenciones. Por contra, el texto de la ponencia oficialista, que se debatirá en la V Asamblea General del próximo mes de marzo, ha sido refrendado con un apabullante 98,13% del escrutinio: 105 votos a favor, uno en contra y una abstención. Menos polémica ha suscitado la Ponencia de Estrategia, que ha sido aprobada por unanimidad.
Pese a la clara derrota de los críticos, la pelota todavía sigue en juego y hasta que el texto no se someta al examen definitivo de la militancia los días 14 y 15 de marzo, no habrá veredicto final. No obstante, el choque de trenes es muy desigual. Es indudable que los de Igea lo tienen muy difícil para llevarse el gato al agua. Y eso por mucho que consideren “un mérito” haber logrado cinco adhesiones y dos abstenciones a su enmienda de devolución, solo una semana después de que dos de sus miembros más destacados (Ignacio Prendes y Orlena de Miguel) y fueran purgados del Consejo General a la vez que se daba entrada a una cincuentena de nuevos miembros, presuntamente afines a la Gestora.
Enmiendas directas de Igea sobre aspectos concretos
Inicialmente, el sector crítico que lidera Igea tenía la intención de presentar una enmienda a la totalidad pero, de momento, han aparcado la idea aunque sin descartarla. En su lugar, van a presentar “enmiendas directas y sobre aspectos concretos -en puntos clave del articulado del estatuto- para que se entiendan mejor y para favorecer el debate”, han explicado fuentes de los críticos próximos al vicepresidente de Castilla y León.
Estas enmiendas parciales se trabajaran con las diferentes agrupaciones locales de Cs de toda España para que vayan en la misma línea. Para que estas prosperen, y fuercen una modificación de los estatutos, será necesario que sean refrendadas por la mayoría de asistentes a la V Asamblea General de Ciudadanos, algo que a priori se perfila como un imposible. Pese a las enmiendas, los afines a Igea mantienen que no pugnarán por la presidencia del partido y que su candidata es también Inés Arrimadas.
En Cataluña, la respuesta de los críticos será más directa. Las corrientes catalanas de Cs que apuestan por la democratización de Ciudadanos, y que se mueven en paralelo a Igea, han confirmado a El Liberal que ya están trabajando en el texto de una enmienda a la totalidad de la ponencia de Estatutos.
Para la gestora, la estructura del partido es "innegociable"
Las mismas fuentes han precisado que los cambios solo afectarán a aquellos capítulos del articulado que tengan que hagan referencia al modelo de partido e incluirán "una propuesta alternativa de organización" mucho más abierta y representativa, donde los comités territoriales tendrán más peso específico, como contrapeso al poder del Presidente y la Ejecutiva Nacional. La iniciativa lo tiene difícil porque “es innegociable un cambio en la estructura”, ha señalado un portavoz próximo a la Gestora de Ciudadanos. Así que pintan bastos.
La última sesión del Consejo General antes del congreso ha sido dura, como las anteriores y no han faltado ciertas dosis de “agresividad”, como coinciden en señalar varios asistentes. Uno de los momentos más tensos se ha producido cuando el secretario general en funciones, José Manuel Villegas ha acusado los críticos de actuar “con mala fe” y con intención manifiesta “de hacer daño al partido”. Los aludidos han criticado que acusándoles gratuitamente de actuar de mala fe “solo se está impidiendo el debate” y que “aprobar las cosas a la búlgara” no es precisamente “una prueba de la democracia interna de un partido”.
Como respuesta, Villegas ha reprochado a la cabeza visible de los críticos en el Consejo General, el viceconsejero de Transparencia de Castilla y León, Fernando Navarro (integrante del núcleo duro de Igea) haber “votado a favor de los anteriores estatutos” en la IV asamblea general, la celebrada en 2017. Navarro le ha respondido al secretario general en funciones que tenía razón. “Me equivoqué gravemente, pero ahora que veo lo que estos estatutos han provocado (la caída en picado de Ciudadanos en las encuestas y su fracaso electoral en las últimas generales) quiero corregirlo”, ha defendido Navarro.
Reuniones en todas las agrupaciones locales
Con la última reunión del Consejo General se allana el camino para que sean aprobadas por la asamblea general las ponencias de Estatutos y de Estrategia, elaboradas por tres integrantes de la gestora del partido: el secretario de Organización, Fran Hervías; el secretario general del grupo parlamentario de Cs en el Congreso de los Diputados, José María Espejo; y el vocal secretario jurídico, Andrés Betancor. A partir del lunes, las diferentes agrupaciones organizarán reuniones de trabajo para redactar sus propias enmiendas, siguiendo las directrices de la Gestora.
Los sectores próximos a Igea y Prendes no se rinden y quieren aprovechar estas reuniones para hacer llegar su mensaje y sus propuestas a la militancia. El objetivo es que las enmiendas de las agrupaciones locales tengan como denominador común el modelo de partido más democrático que defienden los críticos de forma que sea posible revertir la decisión unánime que acaba de tomar el Consejo General durante el congreso del próximo mes de marzo.
Nada más finalizar la reunión del consejo, la dirección de Ciudadanos ha remitido una carta por correo electrónico a todos los militantes animándoles a presentar enmiendas a las dos ponencias: “Todas las enmiendas aportadas por las agrupaciones se estudiarán por la Comisión de Estrategia y por la Comisión de Estatutos. Pero los afiliados tenéis la última palabra, ya que podréis recuperar en la Asamblea aquellas enmiendas que las agrupaciones o las Comisiones no hayan incluido”, señala el documento. La última palabra la tienen las bases. Ese es el clavo ardiendo al que se agarra el sector crítico.