6.35 de la mañana. 5 de septiembre de 2020. La comisaría de la Policía Nacional en Algeciras recibe una alerta de que se está produciendo un alijo de droga en la zona de Getares-Ballenera-Faro, en este mismo municipio. Los narcos, en su huida, embistieron un vehículo policial y provocaron lesiones de gravedad a los uniformados. Una trágica historia que hoy, 31 de julio, escribe su última línea, con una sentencia a la que ha tenido acceso Vozpópuli con condenas de hasta 28 años de cárcel para los implicados y el pago de una multa de 2 millones de euros. “Se trata de una sentencia ejemplarizante”, apuntan desde el sindicato Jupol.
El episodio tuvo una amplia repercusión mediática, habida cuenta de la peligrosa persecución en plena vía pública y de las heridas provocadas a los agentes. La Justicia considera como hecho probado que Isaías Mora, también conocido como Rayo Maquin, conducía el BMW X5 robado con un importante alijo de droga a bordo: 17 fardos de hachís con un peso bruto de 556 kilogramos, con un valor total de 845.914 euros.
El vehículo circulaba por la carretera de los Yankis, cuando advirtió la presencia del coche de la Policía Nacional, un Toyota Prius, a bordo del cual se encontraban un inspector y un agente en prácticas.
Ataque de los narcos
El narco, con intención de inutilizar el coche policial en una posterior persecución, se dirigió hacia su posición. La sentencia destaca que los policías nacionales, “con conocimiento por parte del conductor de la capacidad homicida del vehículo y previendo la posibilidad de acabar con la vida de los agentes”, intentaron salir del vehículo, si bien el BMW impactó brutalmente contra la parte delantera, en particular el lado izquierdo -conductor-, cuando el agente se encontraba aun apeándose del mismo, siendo su cuerpo desplazado a varios metros del vehículo.
Isaías Mora se dio a la fuga a pie y los dos agentes quedaron tendidos con heridas de diversa consideración. El inspector entró “prácticamente muerto” en el hospital, según los informes médicos.
La sentencia recoge hasta siete páginas detallando las graves lesiones que sufrió el inspector, así como sus secuelas. Aún hoy sigue acudiendo a rehabilitación y tiene reconocida una discapacidad del 60%, solicitando segunda actividad sin destino en la Policía Nacional. Durante este tiempo ha pasado varias veces por el quirófano.
En su cuerpo hay registradas hasta 41 cicactrices, varias de ellas superiores a los 31 centímetros. También ha perdido el 70% de visión en un ojo y padece parálisis en varios nervios. Heridas y lesiones que son un recuerdo escrito sobre la piel de aquella fatídica noche.
El agente en prácticas sufrió lesiones que consistieron en policontusiones, traumatismo en hombro izquierdo y rectificación cervical, lesiones que necesitaron una primera asistencia médica y tratamiento posterior, con 39 días de curación. También sufre lesiones más difíciles de apreciar, al menos a simple vista: “[Sufre] como secuelas trastorno neurótico (síndrome de estrés postraumático)”, inciden los partes médicos.
La sentencia considera probada la participación de otro narco, Alexis Ordóñez, para la distribución de la droga. En las investigaciones posteriores, además, se intervinieron varias armas de fuego a un tercer individuo, Mohamed Ahmed, que no tenía ningún tipo de licencia.
De acuerdo a la sentencia, a la que ha tenido acceso este diario, Isaías Mora ha sido condenado a dos penas de doce años de prisión por dos delitos de asesinato en grado de tentativa, y a otros tres años y seis meses por un delito contra la salud pública. Ésta última pena también se le ha impuesto a Alexis Ordóñez. Además, deberán abonar una multa de dos millones de euros. A Isaías Mora, además, se le ha impuesto otra pena de ocho meses de prisión por un delito de receptación.
Por último, Mohamed Ahmed ha sido condenado un año de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas, con la consecuente prohibición de tenencia y porte de armas de tres años.
"Satisfacción" por la sentencia
El sindicato policial Jupol manifiesta su “satisfacción” por la sentencia que “al menos sirve para hacer justicia al compañero atacado brutalmente por los narcos”: “El sindicato Jupol mostró desde el primer momento su completo apoyo al compañero y ha ejercido en todo el proceso la acusación particular”.
“Sobre la sentencia -añaden- creemos que es ejemplarizante y ojalá sirva para acabar con la sensación de impunidad con la actúan los narcos en el campo de Gibraltar y resto de provincia de Cádiz”.