Mariano Pérez-Hickman, quien ha tomado este martes posesión de su escaño en el Congreso en sustitución de la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, se encuentra imputado en el Juzgado de Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón acusado por un delito medioambiental, según el auto de citación como investigado al que ha tenido acceso Vozpópuli.
Se trata de una investigación que cuenta con la acusación de la Abogacía del Estado, la acción Somos Pozuelo y un particular. Pérez-Hickman se encuentra investigado junto al mismo ayuntamiento madrileño y diez personas más. Entre ellos está Diego Lozano, el exjefe de Gabinete del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.
Según el documento, la causa tiene que ver con “un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente ocurrido en Pozuelo de Alarcón”. Fuentes jurídicas conocedoras del caso indican a este periódico que al nuevo diputado del PP se le incluyó como investigado el pasado mes de junio y está citado este mes. Al pasar a ser aforado, su declaración podría suspenderse.
Este mismo martes, antes de proceder a la votación de los puntos del orden del día del Pleno, Pérez-Hickman, que ya tuvo asiento en el Congreso en entre 2000 y 2004 y 2011 y 2016, ha jurado acatar la Constitución, asumiendo así la condición plena de diputado.
Entre 1991 y 2011, Pérez-Hickman fue concejal en Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón (Madrid), ejerció como gerente del PP de Madrid entre 1988 y 1990 y formó parte, como secretario jurídico, de la gestora que dirigió el partido tras la dimisión de Esperanza Aguirre, en 2016.