Turquía ha pedido ayuda a la Unión Europea en favor de las víctimas afectadas por el fuerte terremoto del domingo, que ha dejado más de 500 muertos y numerosos heridos en la provincia oriental de Van. Los supervivientes del seísmo afrontan una situación "muy complicada" al haberse quedado sin hogar, ni refugio en una zona donde las temperaturas son muy bajas, señaló.
El portavoz explicó que la respuesta de cinco países (Austria, Bélgica, Francia, Eslovenia y Suecia) ha sido "inmediata" y que se dispone ya de 1.200 tiendas que podrían llegar a la región en las próximas horas.
Además, la UE ha enviado a seis expertos de protección civil a la zona para ayudar a distribuir el material y un experto humanitario viajará próximamente para evaluar las necesidades sobre el terreno.
Los Veintisiete trabajan de manera coordinada con la ONU en las tareas de asistencia.
El balance de víctimas aumenta a 523 muertos y 1.650 heridos
El balance de víctimas del terremoto de 7,2 grados que sacudió el pasado domingo el sureste de Turquía ha aumentado a 523 muertos y 1.650 heridos, según ha informado este jueves la Dirección de Desastres y Emergencias del Gobierno turco.
En un comunicado, la misma fuente ha precisado que hasta 185 personas han sido rescatadas con vida entre los restos de los edificios derrumbados por el seísmo, que afectó a la provincia de Van. El último balance oficial, difundido este miércoles por la noche, era de 481 muertos.
Mientras, los supervivientes han pedido más tiendas de campaña porque temen morir de frío al tener que dormir a la intemperie. Algunos han acusado al Gobierno de no haber respondido con la rapidez suficiente a la situación causada por el terremoto y de haber entregado la ayuda de forma prioritaria a quienes lo apoyan, y otros han denunciado que hay personas que están acaparando tiendas de campaña y revendiéndolas.
Varios países han respondido a la petición de ayuda de Turquía, que ha solicitado tiendas de campaña, casas prefabricadas y contenedores. Según los medios de comunicación turcos, se están transportando a Van casas prefabricadas enviadas por Israel que Turquía ha aceptado pese al empeoramiento de su relación con ese país.