Asegura el Banco de España que si de los datos de ejecución presupuestaria de los próximos meses se derivase la posibilidad de que estos riesgos se materializasen sería "imprescindible" adoptar medidas adicionales para el cumplimiento de los objetivos fiscales.
No obstante, en su último boletín económico, el supervisor considera que la magnitud de la desviación está a tiempo de ser corregida mediante una correcta gestión de la ejecución presupuestaria en lo que queda de ejercicio.
En la misma línea, los Presupuestos Generales del Estado para 2012, que se aprobarán con cierto retraso debido al calendario electoral, "deberán articular los esfuerzos necesarios" para asegurar el objetivo de déficit para ese año, situado en 4,4 % del PIB, asevera.
El organismo recuerda que los compromisos adoptados por el Gobierno con la Unión Europea en materia fiscal son "incondicionales" y que la economía nacional está sometida a "un estrecho escrutinio" en medio de la actual crisis de deuda soberana.