El primer ministro griego, Yorgos Papandréu, propuso hoy en Atenas que se someta a referéndum el acuerdo alcanzado por la Eurozona para solucionar la crisis griega y que incluye una condonación del 50 por ciento de la deuda del país, y anunció que se someterá a un voto de confianza en el Parlamento.
En un discurso ante sus correligionarios del grupo parlamentario socialista, Papandréu declaró que en estos momentos el pueblo debe decidir con un referendo "si aprueba o no el acuerdo" y afirmó que, "si no lo acepta, entonces no se aplicará".
"En un momento en que el sistema político es objeto de ataques y se le pone en entredicho, es nuestro deber mostrar el papel y el deber del ciudadano sin intermediarios, y eso es el referendo", declaró Papandréu.
El dirigente socialista destacó que en un asunto "que determina el futuro del país, el ciudadano tiene la primera palabra, sin los enfoques que tuercen la realidad por los intereses partidistas".
El mandatario griego también anunció que someterá la gestión de su Gobierno a un voto de confianza del Parlamento, que superaría si logra el apoyo de 151 de los 300 diputados del Legislativo.
El Pasok de Papandréu cuenta con 153 diputados, un apoyo suficiente para superar esa moción y evitar así la convocatoria de elecciones anticipadas que conllevaría perderla.
El primer ministro ha solicitado, hasta el momento sin éxito, el apoyo de la oposición tanto para su estrategia de austeridad como para el plan aprobado el pasado miércoles, por que se perdonan a Grecia unos 100.000 millones de euros de deuda pero que también obliga a Atenas a una dura política de recortes y ahorro.