La petición de firmas para que exista una casilla para la ciencia en la Declaración de la Renta termina este jueves tras registrar más de 282.000 firmas. La propuesta que inició el científico español Francisco J. Hernández, llegará ahora al Ministerio de Hacienda en forma de carta en la que, además de esta petición, se denuncia la situación del sector a raíz de los recortes presupuestarios de los últimos años.

Así, la misiva pide a un Gobierno que "goza de una mayoría política sin precedentes, controlando las dos cámaras legislativas y la mayor parte de las Comunidades Autónomas" que inicie "un procedimiento legal para incluir una casilla en la Declaración de la Renta que permita a los ciudadanos ofrecer el 0,7 por ciento de sus impuestos a invertir en I+D+i". "Esta cantidad sería complementaria a la financiación por otras vías, y se sumaría a lo asignado en los presupuestos generales del Estado", apunta.

Del mismo modo, recuerda que los últimos ejecutivos "vienen recortando más y más el presupuesto en el desarrollo científico y tecnológico del país de una manera alarmante". "Sean Ustedes conscientes de la cantidad de científicos españoles que emigran en busca de un lugar donde sean laboralmente respetados y mejor pagados" señala el escrito.

En cuanto a las razones para llevar a cabo esta iniciativa, la carta destaca que "la Ciencia es un camino hacia el conocimiento, pero no es sólo algo altruista; la Ciencia es útil y necesaria". Y añade que "sólo mediante la investigación subvencionada desde el Estado pueden los científicos trabajar independientemente y en beneficio de la sociedad".

"España necesita a estos profesionales de alta calcificación trabajando en buenas condiciones en beneficio de nuestro país. Una inversión en alta tecnología colaboraría a que España se colocase entre la élite mundial", concluye.

LOS PARTIDOS NO VEN OPORTUNA LA PROPUESTA

Tras ponerse en marcha esta iniciativa, los políticos del PP, PSOE, CiU, PNV y UPyD señalaron no estar de acuerdo con ella, al considerar que en esta coyuntura de crisis económica no es ni la mejor vía, ni el momento, para garantizar la inversión en I+D+i en España.

Por el contrario, la idea sí ha sido vista con buenos ojos por el diputado de ICV y portavoz de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) en la Comisión de Economía y Competitividad, Joan Coscubiela, quien cree que se trata de una nueva opción para que la investigación, el desarrollo y la innovación, encuentren una nueva vía de financiación, después del recorte de 600 millones de euros del Gobierno.

También se ha mostrado a favor de esta idea el nuevo presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Manuel Lora-Tamayo, quien, en una entrevista a Europa Press, ha indicado que valora "positivamente cualquier iniciativa que sirva para apoyar la ciencia" y "más hoy en día si se trata en términos económicos". Por su parte, el director del Max Planck, Ignacio Cirac, la calificó de "fenomenal" ya que permite que, "además del presupuesto", "la gente pueda, si quiere, apoyar de manera libre y voluntaria a la ciencia".