Una semana después de que el Ministerio de Transportes anunciara la adquisición de 8 millones de mascarillas, el ministro José Luis Ábalos sigue sin saber cuándo llegarán los suministros para proteger del coronavirus a los conductores de toda España. Mientras el titular de Transportes defiende la "buena marcha" de la compra, un documento interno, al que ha tenido acceso Vozpópuli, revela que el destinatario del material podría ser el Ministerio de Sanidad.
Según respondió este jueves el propio ministro Ábalos en rueda de prensa, la compra se materializó el pasado lunes. “El avión ya salió”, aseguró, si bien desconoce cuándo se producirá la recepción de una mercancía que llegará “en cuatro entregas”. A esa partida de 8 millones de mascarillas a la que se sumarán otros 5 millones de unidades, como recoge el BOE este viernes: un hecho que Ábalos omitió en su comparecencia junto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Ábalos únicamente hizo mención a la orden que Transportes aprobó el pasado viernes 20 de marzo para adquirir un "máximo" de 8 millones de mascarillas FFP2 —de “alta calidad”— con el fin de suministrarlas a todo tipo de transportistas: de mercancías, taxistas, conductores de VTC, así como el personal que trabaja en Renfe, ADIF, AENA, Correos y Puertos del Estado. Este último ente público sería el encargado de materializar la compra mediante un procedimiento de emergencia, un instrumento que flexibiliza al máximo los plazos y la elección de la empresa adjudicataria.
Esta compra centralizada tiene por fin “contribuir a que estos colectivos acometan con seguridad el trabajo que realizan para garantizar el abastecimiento de productos y los movimientos de ciudadanos que tengan que viajar por causas de fuerza mayor durante el estado de alarma”, así como “la entrega de productos adquiridos en el comercio por internet, telefónico o correspondencia”. Todo con tal prevenir un posible colapso de la red de transportes en España, inclusive en aquellos ámbitos que no sean de su competencia, por lo que las administraciones locales y autonómicas deberán pagar su parte.
Sin embargo, en una carta “informal” remitida por la Dirección General de Transportes Terrestres a las comunidades autónomas, y a la cual ha tenido acceso Vozpópuli, el Ministerio reconoce que las mascarillas podrían ser finalmente para Sanidad: “No tenemos todavía certeza sobre la fecha de recepción y además hay que tener en cuenta que corresponde al Ministerio de Sanidad establecer la prioridad de asignación de este tipo de material”.
Dos mascarillas por persona
La misiva adelanta que “se asignarán dos mascarillas por conductor o maquinista de vehículos”. Además, la Dirección General de Transportes Terrestres especifica que "hay que tener en cuenta en todo caso que las mascarillas no son para llevarlas puestas de continuo, si no solamente en aquellas circunstancias en las que no se puede respetar la distancia social de seguridad sanitaria, reservando el uso de las mismas en el resto de ocasiones”.
"Las mascarillas no son para llevarlas puestas de continuo. [...] El objetivo es que cada mascarilla tenga durabilidad durante un periodo prolongado"
“El objetivo es que cada mascarilla tenga durabilidad durante un periodo prolongado”, indica: “Respetar las distancias de seguridad sanitaria sigue siendo la medida más efectiva, por lo que se debe seguir trabajando en esta línea, con medidas operativas y organizativas como las que ya vais implantando todos, o instalación de mamparas de protección, etc”.
Por otro lado, la Dirección General de Transportes Terrestres pide a las administraciones autonómicas que comuniquen en 48 horas sus necesidades “al objeto de conocer el número de mascarillas a distribuir, en función de los servicios mínimos establecidos o conocidos por la autoridad de transporte de esa comunidad autónoma” para “atender las necesidades” de metros, tranvías, buses urbanos y el “ferrocarril de competencia autonómica”.
Otra compra sin previo pago
Sorpresivamente, y sin anuncio previo por parte del ministro, Transportes ha emitido una nueva orden “por la que se regula una segunda adquisición y distribución de mascarillas”. Según recoge el Boletín Oficial del Estado de este viernes 27 de marzo, el Ministerio dirigido por Ábalos “estima preciso ampliar el objeto de la medida aprobada” ya, “incrementando el suministro en un máximo de 5.000.000 de mascarillas”.
Esta segunda adquisición “se realizará de forma centralizada por la entidad pública empresarial Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF)”. El criterio de reparto de será similar al de la anterior orden, con las mismas instrucciones establecidas por la Dirección General de Transporte Terrestre. No obstante, la nueva orden advierte que “la distribución concreta entre los destinatarios se realizará teniendo en cuenta las necesidades derivadas de la evolución de la situación de emergencia de salud pública ocasionada por el Covid-19 en el momento de la recepción del suministro”.
Las empresas dependientes de Transportes no pagará al proveedor hasta recibir la mercancía, y cobrará a las administraciones autonómicas y locales por el suministro de mascarillas "con cargo al crédito presupuestario"
Como en la primera orden, las administraciones locales y autonómicos que reciban estas mascarillas deberán abonarlas a la empresa pública que ejecute la compra: ADIF, en este caso, Puertos del Estado, si proceden de la primera adquisición. Dicho pago se hará “con cargo al crédito presupuestario que se habilite expresamente a tal fin”.
En cuanto al pago al proveedor designado, la nueva orden establece que “la empresa suministradora sólo tendrá derecho al abono del precio de los suministros efectivamente entregados y formalmente recibidos”. Es decir, sin previo pago, que es sin embargo el método más habitual en las compras al por mayor en China, el principal mercado al que están recurriendo las administraciones españolas para poner solución al desabastecimiento de material sanitario.