El excoordinador del Equipo Jurídico de Podemos José Manuel Calvente, que fue despedido en diciembre pasado, prepara su estrategia para exigir responsabilidades judiciales al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, y a otros miembros de la cúpula de la formación morada, quienes le acusaron de haber acosado sexualmente a una compañera de partido, según explican a Vozpópuli fuentes cercanas al letrado.
Este miércoles, la titular del Juzgado de Instrucción número 32 de Madrid, Rosa María Freire, archivó la querella que interpuso la abogada de Podemos Marta Flor Núñez, quien había acusado a José Manuel Calvente de los delitos de hostigamiento, acoso laboral, acoso sexual, coacciones y lesiones. En la resolución, la instructora apunta que la dirección del partido podría haber "instrumentalizado" la querella de la letrada, y que esta había servido "de base para sostener su despido".
La magistrada llega a esa conclusión tras detectar que "hay muchas coincidencias fácticas y de valoración entre la querella y la carta de despido. Y es cierto que este se adoptó sin intervención de los órganos internos encargados de la salud laboral de los empleados de la formación política, por vía de un expediente contradictorio", apunta la juez, que después concluye: "La jurisdicción laboral se ocupará de ello".
Reactivar la demanda
Según explican a este diario fuentes cercanas al exabogado de Podemos, Calvente planea reactivar la demanda de conciliación que presentó en julio de 2019 contra su excompañera, previa a interponer una querella, en la que tiene intención de incluir a Iglesias y otros dirigentes de Podemos, que según su versión, le acusaron de haber cometido acoso sexual sin pruebas.
Las acciones legales las paralizó, explican a este diario las citadas fuentes, tras ser despedido de Podemos, y ser objeto de la denuncia de su excompañera en el Equipo Legal de la formación liderada por Pablo Iglesias. En cuanto la decisión de la magistrada sea firme Calvente reanudará sus acciones legales, que ahora cuentan con el aval de la decisión de Rosa María Freire.
Sin embargo, este letrado incluirá ahora a otros dirigentes de Podemos, incluido Pablo Iglesias, por haber articulado un "montaje" o "una simulación de un delito". En concreto, Iglesias hizo unas declaraciones el 6 de diciembre pasado, durante la celebración del Aniversario de la Constitución Española, en las que justificaba el despido de Calvente por haber acosado a Marta Flor Núñez.
Protagonismo impuesto
Por su parte, la propia juez llega a apuntar en su auto que el "protagonismo" de la denunciante en el despido podría haber sido "impuesto por la organización", ya que el mismo se hizo "con apoyo, en gran medida, de los datos y valoraciones aportados por la querellante".
Rosa María Freite acordó el archivo de la querella de acuerdo con la Fiscalía de Madrid, pese a que la denunciante señalaba que tras haberse negado a mantener una relación de amistad con el querellado, este dejó sin contenido su labor profesional, impidiéndole acceder a los procedimientos judiciales del partido. Aseguró entonces que el letrado "atentó contra su dignidad como mujer, persona y trabajadora".
Sin embargo, tanto Calvente como otra trabajadora de Podemos despedida señalaron que fueron relevados por querer realizar una investigación interna sobre posibles "irregularidades financieras, en material laboral y de limpieza en la realización de consultas y primarias" dentro de la formación de Pablo Iglesias.
Precisamente este miércoles Calvente ratificó ante un juez de Madrid una denuncia contra la cúpula de Podemos por delitos de financiación ilegal, blanqueo de capitales, administración desleal y revelación de secretos.