El ‘alcaldable’ del Partido Popular en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, quiere que en la próxima legislatura tras las elecciones municipales del próximo 24 de mayo los barceloneses puedan cobrar la deuda de 317 millones de euros adquirida conla Generalitat catalana, gobernada por el presidente Artur Mas (CiU).
Fernández Díaz está basando su campaña electoral en rebajar impuestos, defender el uso real del castellano y catalán en el Ayuntamiento de Barcelona y en la ciudad, reducir las desigualdades sociales con el objetivo de lograr aumentar sus actuales 9 concejales y hacer posible un gobierno alternativo a los nacionalistas de CiU y a la izquierda radical de Barcelona en Comú, que lidera Ada Colau. Fernández también propone que los inmigrantes demuestren cinco años de empadronamiento en Barcelona para acceder a determinadas ayudas sociales que actualmente se pagan con recursos públicos.
Si es usted elegido próximo alcalde de Barcelona, ¿cuál sería su primera medida para reducir la deuda de la Generalitat con el consistorio barcelonés?
- En los últimos cuatro años de legislatura municipal de Xavier Trias (CiU) en Barcelona la deuda del Ayuntamiento de Barcelona conla Generalitat se ha duplicado por la mala gestión de Trias hasta alcanzar los 317 millones de euros. Y esta situación es insostenible para los ciudadanos barceloneses que han visto cómo se ha incrementado la presión fiscal aumentando también las desigualdades. La lista del PP que yo encabezo en Barcelona tiene como objetivo reducir esa deuda y me comprometo a llevar ala Generalitata los tribunales si no devuelve en un plazo razonable dicha deuda.
- ¿En qué medida rebajará impuestos a los barceloneses?
Me comprometo a rebajar el Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) en un 20% a todos los barceloneses propietarios de viviendas
Me comprometo a rebajar el Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) en un 20% a todos los barceloneses propietarios de viviendas. Esta medida es factible, asumible y obligada desde el consistorio que permitiría aminorar el tipo impositivo del 0,75% al 0,60%. Es posible, factible y además es obligado porque actualmente el IBI representa el 50% de los ingresos tributarios del Ayuntamiento de Barcelona, y el 25% de los ingresos totales. He criticado en esta legislatura municipal que el alcalde en funciones Xavier Trias (CiU) haya mantenido una política fiscal continuista con la de los anteriores gobiernos municipales del tripartito de izquierdas PSC e ICV-EUiA manteniendo "impuestos al máximo y demasiados servicios al mínimo.
También defiendo introducir bonificaciones a los colectivos que más lo necesitan, así como la supresión del tributo metropolitano de movilidad -un recargo sobre el IBI- porque se hace pagar por igual a vecinos que reciben el servicio de transporte de forma desigual.
- ¿Qué le acerca y le aleja de Ciudadanos?
Me acerca que ambas formaciones no somos independentistas, pero me alejan muchas cosas. Por enumerarle algunas, puedo decirle que desde hace ya más de diez años que el PP es el único partido en el Ayuntamiento de Barcelona y en sus plenos que defiende el bilingüismo real en las comunicaciones del consistorio con sus ciudadanos para que estén al mismo nivel el catalán y el castellano, algo que no existe actualmente porque el alcalde Xavier Trias defiende el uso mayoritario del catalán en detrimento del castellano porque se ha hecho independentista. También fui el primero en defender el pacto municipal por Barcelona algo que desde el PP defendimos impugnando las medidas contrarias al bilingüismo del gobierno de Trias algo que no hizo Ciudadanos.
- ¿Cree realmente posible que con sus 9 diputados, si los mantiene ante una alejada mayoría absoluta de 21 concejales en Barcelona podrá conformar un gobierno alternativo al nacionalista de CiU o a la izquierda radical de Ada Colau?
Desde el PP en el Ayuntamiento de Barcelona trabajamos a diario y, en especial en esta campaña electoral, para que todos los partidos no independentistas puedan sumarse a nuestro proyecto y conformar tras las elecciones y si los barceloneses nos dan su confianza un gobierno alternativo al independentismo de CiU, ERC o al de la izquierda radical.
Pero echo mucho de menos que el PSC demuestre abiertamente que no es independentista. Aunque eso creo que no va a ocurrir, puesto que el PSC ha ido apoyando o a veces no impidiendo las decisiones en valor de la independencia que ha tomado el alcalde Xavier Trias. Sería bueno que los socialistas de Barcelona se sumara a la “Casa Gran” –ayuntamiento- de una Barcelona catalana y española que defendemos desde el PP barcelonés.
- ¿Qué modelo de Barcelona defiende el PP que usted lidera?
Quiero una Barcelona bilingüe, que defienda al mismo nivel al catalán y al castellano
Una Barcelona bilingüe, que es capital de Cataluña, pero también la segunda gran ciudad de España. Una Barcelona que defienda al mismo nivel al catalán y al castellano, que garantice el cumplimiento de los derechos y deberes de los inmigrantes, que persiga la delincuencia, que defienda la libertad y a los emprendedores y la lealtad institucional con el resto de ciudades españolas y que reduzca impuestos para reducir las desigualdades y ayudar a los emprendedores y a mejorar los servicios para las personas mayores y niños.
- Ha recibido muchas críticas por proponer que sólo los inmigrantes empadronados durante cinco años en Barcelona puedan recibir ayudas sociales complementarias, ¿no cree que los inmigrantes ayudas a generar riqueza para la ciudad?
Evidentemente que creo que una persona que llega a Barcelona desde otro país tiene las mismas oportunidades que otra persona de aquí. Pero lo que creo es que hay que respetar los derechos de estas personas, pero también tienen deberes como todos los ciudadanos. Pedimos a los inmigrantes cinco años de empadronamiento si quieren acceder a servicios sociales complementarios. Es decir, si piden ayudas para actividades extraescolares, para el alquiler o incluso para prestaciones sanitarias no esenciales como los tratamientos ortopédicos deberán contar con cinco años de empadronamiento.
- Si es usted elegido alcalde, ¿prohibiría a las mujeres musulmanas usar en la calle el velo islámico integral?
Defendemos la prohibición del uso del burka o del velo integral por las calles de Barcelona porque son elementos de la cultura islámica que reflejan el trato discriminatorio a la mujer. No lo podemos consentir y tampoco aceptamos desde el PP en Barcelona la construcción de una gran mezquita en la capital catalana.
- ¿Cómo mejoraría la percepción de que Barcelona recibe turismo “mochilero” que gasta poco y no beneficia a la ciudad por determinados excesos en la vía pública vinculados al consumo de drogas y alcohol?
Trabajaremos para una mejor gestión del turismo en la ciudad y compatibilizar el turismo con la convivencia en los barrios, aplicando la ordenanza de civismo y la inspección de las actividades ilegales. Apostaremos para posicionar Barcelona como marca turística de calidad y como puerta de entrada de Cataluña y de España, mejorando el atractivo para los nuevos visitantes.
En cuanto al denominado turismo de borrachera que suele alquilar pisos ilegales en barrios comola Barcelonetaquiero dejar claro que desde el PP queremos acabar con la permisividad y la tolerancia ante el incivismo y elaboraremos una nueva Ordenanza de Civismo con medidas para fomentar y garantizar la convivencia ciudadana en el espacio público de Barcelona con el fin de acabar con las ambigüedades de la actual normativa prohibiendo diferentes conductas que hasta ahora están permitidas.
Entre nuestras propuestas está la de prohibir el nudismo y el seminudismo en la vía pública, así como el consumo de drogas en lugares públicos.