El Gobierno ha decidido nombrar a Miguel Carmona, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Madrid, magistrado de enlace en Londres, después de agotar su mandato como vocal en el Consejo General del Poder Judicial. De este modo, el juez Pablo Ruz, que ocupaba este puesto en sustitución de Carmona, podrá seguir al frente de la instrucción de casos como el de la trama Gürtel o los conocidos como 'papeles de Bárcenas', en los que lleva meses trabajando.
La decisión ha sido promovida por el ministro de Justicia y supone que Carmona, quien había solicitado en un principio una plaza en el tribunal que juzga los crímenes contra los derechos humanos de la antigua Yugoslavia, pase a actuar de enlace ante las autoridades judiciales del Reino Unido, una plaza creada para él.
Según explican desde Justicia, este nombramiento se suma, dentro de las actuaciones encaminadas a reforzar la presencia exterior de España en los organismos jurídicos internacionales, a la propuesta del tercer candidato exigido por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para ser nombrado juez Ad Hoc. Se trata del catedrático de Derecho Procesal de la Universidad Autónoma de Madrid, Juan Damián Moreno. Su nombre se une a los dos candidatos ya designados el pasado 19 de julio: el catedrático de la Complutense de Madrid y ex presidente del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, Gil Carlos Rodríguez Iglesias, y la profesora de Derecho de la Unión Europea en el Centro de Estudios Financieros, Blanca Lozano Cutanda.
Igualmente, Ruiz-Gallardón ha informado al Consejo de Ministros que el magistrado Jorge Carrera, actualmente consejero de Justicia en la Representación Permanente de España ante la Unión Europea (Reper), será adscrito provisionalmente a la Embajada española en Estados Unidos mientras se cierran los trámites para su nombramiento definitivo como consejero de Justicia en esta embajada.
En la actualidad España ya cuenta con jueces de enlace en Francia y en Italia, así como con un consejero de Cooperación Jurídica en Rabat. Su función consiste en reforzar la cooperación y coordinación jurídica existente entre España y cada uno de esos países, lo que a partir de ahora también sucederá con Reino Unido y Estados Unidos. Si bien las relaciones con ambos países son buenas, el Gobierno considera fundamental reforzar la cooperación jurídica con ambos y dotar de asistencia jurídica específica a las embajadas de uno y otro país, pues en ambos rige el sistema anglosajón de la Common Law y un magistrado de enlace servirá de interlocutor directo y apoyo para la adaptación y confluencia de aquel sistema con el derecho español.
La designación de juez de enlace debe hacerse entre miembros de la carrera judicial o fiscal con al menos cinco años de servicio. En el caso de Miguel Carmona, que ha manifestado su deseo de ejercer en el extranjero, se han tenido en cuenta sus responsabilidades en el ámbito de la cooperación jurídica internacional, como haber sido presidente de Medel (Magistrados europeos para la democracia y la libertad) entre 2005 y 2007 y representante de esta asociación en distintos foros internacionales. Actualmente, es el presidente de la Red Europea de Consejos Judiciales y de la Comisión de Relaciones Internacionales del Consejo General del Poder Judicial.