A la espera de la próxima reunión sobre financiación autonómica que mantendrá el presidente andaluz, Juanma Moreno, con su homólogo gallego, Alberto Núñez Feijóo, fijada para este próximo viernes, el consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, ha vuelto a denunciar los agravios que padece Andalucía con respecto a Cataluña (en los PGE) en materia de inversiones para 2022, a pesar de tener la primera mayor población, parámetro por el que se rige la alianza de comunidades infrafinanciadas liderada por Moreno, que tiene entre sus aliados a Valencia y Murcia, pendientes de que se sume también Castilla La Mancha.
Tras el Consejo de Gobierno celebrado este martes, ya en la comparecencia habitual ante los periodistas, Bendodo ha dicho no entender que en los Presupuestos Generales del Estado "Andalucía vaya a recibir un 16% menos por habitante de lo que va a recibir Cataluña, siendo la más poblada".
El hombre fuerte del Partido Popular dentro del Gobierno de coalición con Ciudadanos ha precisado que un ciudadano andaluz "recibe 45,5 euros menos de inversión que un catalán". Se trata, ha concretado Bendodo, de poco más de 267 euros frente a 313,3.
"¿Qué culpa tienen los andaluces para este maltrato, que ya no gobierna el PSOE aquí?", se ha preguntado el consejero acompañada de la titular de la Consejería de Fomento, también del PP, Marifrán Carazo.
Bendodo cree que "no merecemos que se dejen fuera" de los PGE proyectos como el tren litoral de Málaga, una vieja aspiración de hace varias décadas para conectar toda la Costa del Sol Occidental, si se tiene en cuenta que el cercanías sólo llega hasta Fuengirola; así como "la conexión con el aeropuerto de Sevilla", otra demanda de los ciudadanos hispalenses, así como viajeros y turistas, que no tienen una línea férrea que les conecte entre el AVE y el aeródromo.
Desde el Ejecutivo andaluz vuelven a recordar a la ministra de Hacienda, la andaluza María Jesús Montero, reforzada en el 40 Congreso del PSOE en la Ejecutiva de Pedro Sánchez, que en los PGE "no se contempla el fondo de compensación para comunidades infrafinanciadas". Se trata del documento presentado por Moreno Bonilla y Ximo Puig cuando ambos presidentes se reunieron en Sevilla hace varias semanas.
Compensar a las comunidades
"El Estado tendrá que hacer un esfuerzo con ambas comunidades para poder compensar esa hemorragia de forma urgente", expuso Moreno el pasado 21 de septiembre en presencia de Puig. Ambos condensaron que serían necesarios "unos 1.700 millones de euros, para taponarla".
Sobre la incógnita que se les planteó a Moreno y Puig sobre de dónde saldría el dinero del llamado "fondo de compensación", el primero de ellos se adelantó a dejar claro que "no habrá menoscabo, ni deterioro, dentro del sistema de financiación del resto de comunidades".
A juicio del considerado barón moderado del Partido Popular "necesitamos de un ejercicio de audacia y diplomacia", dijo Moreno tras insistir en que Andalucía y Valencia "representan casi el 30% de la población española". Así pues, recalcó que "si un tercio de la población española tiene un problema, España tiene un problema".
En el marco de esta declaración institucional de los presidentes de Andalucía y Valencia, recogida en un documento impreso de once puntos consensuados y tres folios, se refleja que al ser necesario "un tiempo" para llegar a un "amplio consenso político" entre administraciones y "fuerzas políticas", se hace indispensable la adopción de lo que Puig y Moreno definieron como "medidas transitorias" que nivelen la financiación de las CCAA que resultan "infrafinanciadas por el actual modelo".
El llamado "fondo transitorio compensatorio" sería de nivelación prorrogable "automáticamente", hasta la entrada en vigor de un nuevo sistema que "equipare a las Comunidades infrafinanciadas con la media nacional".
En base a lo anterior, se "corrige" lo que califican como "desequilibrio horizontal" entre comunidades de los "recursos" del sistema de financiación que "padecen las autonomías que reciben una financiación por debajo de la media, sin perjudicar al resto", concluía el documento citado.
Este martes Elías Bendodo ha vuelto a recordar que el Gobierno de Pedro Sánchez "debe a los andaluces 10.835 millones" de euros. Una cifra que, según ha dicho, "aumenta cada día en cuatro millones". De ahí que el brazo derecho de Moreno en la Junta haya anunciado que Andalucía "será beligerante para exigir lo que le corresponde".
Feijóo en Sevilla
De las palabras de Bendodo, a preguntas de Vozpópuli, ha quedado evidenciado que el futuro modelo de financiación autonómica, frente en el que está inmerso Juanma Moreno, no es el principal motivo de la visita que la hará Núñez Feijóo este viernes en San Telmo, si bien dicho asunto está en la agenda de temas a tratar.
Tal y como ya avanzó este medio digital, en varias informaciones publicadas días atrás, la cooperación en materia turística entre Galicia y Andalucía centra el viaje de Feijóo. De hecho, Bendodo se ha referido a que el presidente gallego quiere "implicar a Andalucía" en los actos del Año Xacobeo. Además, ha proseguido el consejero de Presidencia, "hablaremos de revolución verde, economía azul, incendios forestales, financiación, evidentemente, y muchísimas otras cuestiones".
De sobra es conocido que Moreno y Feijóo, considerados ambos los principales barones moderados frente a la línea más a la derecha de Pablo Casado en Génova, mantienen posiciones muy distintas en materia de financiación autonómica. Juanma Moreno respalda la propuesta del socialista Ximo Puig de priorizar en el reparto a las CCAA con más población, una posición que comparte con Isabel Díaz Ayuso. Feijóo, por su parte, se opone a la medida, que en su opinión castiga a la "España vaciada".
Sin embargo, el gallego y el andaluz tratarán este viernes de consensuar una posición que pueda ser defendida por todos en el Partido Popular, algo que ha trascendido y se antoja complicado, a priori.
Fuentes próximas al presidente de la Junta de Andalucía afirman que él y Feijóo "defienden que hay que modificar el actual sistema, y en eso se va a trabajar". Abogan por que se calcule cuánto cuesta pagar los servicios públicos en cada comunidad autónoma, y hacer el reparto en función de ello. "Algo con lo que todos estamos de acuerdo", inciden.
Desde la Xunta de Galicia reconocen que Feijóo "no puede aceptar" un nuevo modelo de reparto basado únicamente en la "densidad de población de las comunidades autónomas". No obstante, añaden, existen otros criterios vinculados a la población que pueden facilitar un entendimiento entre dos corrientes totalmente contrarias.
En ese sentido, el presidente gallego apuesta por incluir "la edad de la población" como nuevo baremo para la financiación autonómica. Desde el entorno de la Xunta explican los motivos: "Galicia tiene una población envejecida y es obvio que se necesitan más recursos para atender a una población mayor. Sería justo, por tanto, recibir más fondos".
Las fuentes consultadas también ven posible acordar un sistema de financiación en el que se tenga en cuenta la población en función del número de provincias de la comunidad autónoma. En ese sentido, añaden, si se tiene en cuenta la "dispersión" como criterio también vinculado a la población, se eliminaría el 'castigo' a las CCAA menos pobladas.
Desde la Junta de Andalucía confirman a Vozpópuli que están a favor de esos baremos: "Nosotros lo llamamos 'población ajustada', donde incluimos, para el reparto, esos otros criterios vinculados como el de la edad de la población o su dispersión", concluyen.