Andalucía

Moreno marca territorio en el centro izquierda al imponer "líneas rojas" a Vox

El presidente de la Junta de Andalucía tiene como irrenunciables sus políticas contra la violencia de género, el cambio climático, negado por los de Abascal, y el modelo autonómico en base al Estatuto y la Constitución

  • El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, este lunes en Almería.

En el argumentario de Juanma Moreno para reivindicar un gobierno del PP en solitario – sin Vox– ya no está únicamente la posibilidad de sacar él solo más votos que toda la izquierda junta, para gobernar a lo Ayuso. Este martes el presidente de la Junta daba un paso más, al establecer una serie de "líneas rojas" al partido de Santiago Abascal. El nuevo discurso del barón autonómico le hace marcar territorio en el centro izquierda, el espacio ideológico que está empeñado en conquistar y acaparar en las urnas. Quiere nutrirse de votantes descontentos con las políticas de Pedro Sánchez, principalmente.

Moreno se ha visto obligado a ampliar sus motivos para un gobierno monocolor después de que el pasado domingo, en una entrevista con El Confidencial, no descartara la repetición de elecciones tras las que se van a celebrar el 19 de junio. "Yo veo inviable cualquier gobierno si intentan imponernos agenda que vulnere mis líneas rojas", expone.

Hay banderas consideradas como "irrenunciables" para el PP andaluz y que lindan con la socialdemocracia y el acercamiento al voto femenino. Una de ellas es la defensa a ultranza de la Ley de Violencia de Género, defendida por la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, Rocío Ruiz. La ahora candidata por Cádiz de Ciudadanos representa, precisamente, el ala más socialdemócrata del Ejecutivo de Moreno.

Las fuentes gubernamentales del PP consultadas por Vozpópuli sostienen que "cuanto más ataque Macarena Olona nuestras políticas sociales en la Junta más nos acerca a votantes de centro izquierda". Se trata del llamado "dique de contención", expresión que meses atrás comenzó a utilizar el CEO de Deimos Estadística, Ramón Alberca, para referirse a cómo ese tipo de antiguos votantes socialistas ven a Juanma Moreno como "freno a Vox" y le "prestan" sus votos para ello.

Las políticas de acogida a menores inmigrantes

Otra de las políticas que demoniza Olona es la que se ha llevado a cabo para la acogida de menores inmigrantes no acompañados, provenientes de Marruecos. Vox hizo blanco de todas sus críticas a la citada consejera de Cs. Moreno, lejos de censurar cualquier actuación de su compañera, la respaldó públicamente. El presidente de la Junta ha pretendido trasladar siempre una imagen solidaria hacia los menores del norte de Africa que recalaban en Andalucía. Se trata, añaden las fuentes citadas, de otro punto a su favor para alejar cualquier intento del PSOE de situar a Moreno en lo que Juan Espadas llama "la coalición Olona-Bonilla".

Precisamente, este martes Santiago Abascal ha criticado "los incumplimientos" de Moreno y el PP con Vox en materia de inmigración. Se ha referido a la petición que formularon para que el Gobierno andaluz, a través de la Consejería de Salud, trasladara a la Policía Nacional los datos de todos los inmigrantes irregulares que llegan desde África, una vez atendidos por la asistencia médica de rigor.

El presidente de la Junta matizaba este lunes, tras el revuelo formado por sus declaraciones del domingo, que "no sería deseable", por su parte, una repetición electoral. No obstante, Moreno dejaba claro a continuación que, en caso de no lograr "mayoría suficiente", para gobernar en solitario, sería "inviable" cualquier posibilidad de gobierno si los otros partidos, en clara alusión a Vox, "intentan imponernos una agenda que vulnere mis líneas rojas" marcadas por el "Estatuto de Andalucía".

Además de las políticas destinadas a luchar contra la llamada "violencia machista" y no "intrafamiliar", como pretende imponer Vox a PP y Cs, las otras dos "líneas rojas" de Moreno Bonilla pasan por mantener su agenda del cambio climático, en clara sintonía con la agenda 2030, así como rechazar cualquier modificación alguna en política autonómica frente a la derecha radical, clara detractora del Estado de las autonomías. Las dos normas por las que dice regirse el gobernante centrista son "el Estatuto de Autonomía y la Constitución". Sobre estas dos normas no caben concesiones a Vox.

No ha pasado desapercibido que Moreno añadiera estas "líneas rojas" como nuevos motivos para su gobierno en solitario justo el día que se conocía una encuesta del digital OkDiario que otorgaba al PP 41 escaños; a Vox 25 y al PSOE 34. Por su parte, la coalición izquierdista Por Andalucía sumaba 7 y Adelante Andalucía (nacionalista de izquierdas) otros 2. La primera lectura a extraer de dicho sondeo es que el PP no logra sacar más escaños en solitario que toda la izquierda junta. Si finalmente eso sucede, el candidato popular se quedará sin su principal argumento para gobernar en solitario. Tendría que contar con Macarena Olona como vicepresidenta de la Junta.

Fuentes del PP andaluz consultadas por Vozpópuli niegan que el argumento de las "líneas rojas" introducido por Moreno guarde relación alguna con el último sondeo publicado. Y es que tanto en la dirección regional de la formación, como en San Telmo, aseguran que sus 'trackings' son mejores: "nosotros subimos y ellos bajan", dicen sobre Vox, por lo que rechazan estar actualmente en 41 diputados.

Desde Vox, como es comprensible, sostienen lo contrario y afirman que mientras el partido de Abascal sube en intención de voto el PP baja. Sin ir más lejos, en la mañana de este lunes Santiago Abascal aseguraba tener sondeos internos que les dan 26 escaños "los mismos que obtuvo Juanma Moreno en 2018", ha comparado durante una entrevista en EsRadio. En ella ha animado al candidato del PP-A a "cambiar de opinión" en relación a gobernar en solitario. Sostiene, además, que su línea de actuación en Andalucía será "como en Castilla y León" a la hora de entrar en gobierno, sin necesidad de ir a unas segundas eleciones, ha confiado.

Dentro de los planes que contempla Moreno para gobernar sin Vox está también la posibilidad de sumar junto a a Cs una mayoría, sin ser absoluta, que le permitiese intentar forzar a los de Abascal a abstenerse en su investidura. Todo ello, incluso con los libares como socios para reeditar la actual coalición de gobierno.

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