El exdiputado de Podemos José Antonio Delgado Ramos desempeñará desde ahora la función de asesor del Ministerio del Interior. El que fuera conocido como ‘el guardia civil de Pablo Iglesias’ por su condición de agente del Instituto Armado se había quedado sin escaño tras las pasadas elecciones generales. Ahora ocupará un cargo de confianza propio de funcionario de Nivel 30 (el máximo en la Administración) que ha indignado a sectores del Cuerpo.
“Llevo 28 años en la Guardia Civil, 20 defendiendo los derechos de los guardias civiles, 18 expedientes disciplinarios con propuesta de expulsión y ninguna medalla. No he cambiado en nada, sigo perteneciendo a Unidas Podemos y defenderé lo que he defendido siempre”, asegura Delgado Ramos en declaraciones a Vozpópuli.
Fuentes conocedoras de las bambalinas de este nombramiento aseguran que la decisión parte de Moncloa y no ha sido del todo bien recibido por el Departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska. Tras casi dos décadas de militancia en el movimiento asociativo en defensa de los derechos de los guardias civiles en el seno de la mayoritaria Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), fichó en 2015 por Podemos para optar a un puesto en el Congreso de los Diputados.
"Dedazo y Podemos no son compatibles"
Aquel año en una entrevista concedida a El País dijo que tras la política retomaría su carrera: “Cuando lo dejé, volveré al coche patrulla”. También criticaba los nombramientos que se deciden “entre amigotes en los despachos” y destacaba que “dedazo y Podemos no son compatibles”. Se refería a una pregunta que cuestionaba el hecho de ocupar el número dos en la lista del partido por Cádiz.
Entre las voces consultadas por este periódico, miembros de diferente graduación lo ven como “una puerta giratoria”, reprochan algunas de las decisiones o pronunciamientos de Delgado Ramos durante su actividad política o lo califican como un nombramiento a dedo. Cuestionan el conocimiento de Delgado Ramos en la materia concreta para la que va a asesorar y que no haya pedido una excedencia para optar a esta nueva función.
Este viernes el Boletín Oficial del Estado hacía oficial el nombramiento avanzado esta semana por Europa Press. Delgado Ramos, adscrito a la Comandancia de Cádiz hasta ahora, pasa a ser asesor de la Secretaría de Estado de Seguridad y a residir en Madrid. Concretamente desempeñará sus funciones en la Dirección General de Tráfico, según precisan en el Ministerio que dirige Fernando Grande Marlaska.
Funciones por definir
Una portavoz de Tráfico consultada por este periódico afirmaba que por el momento se desconoce cuál es la materia exacta en la que va a asesorar ya que la crisis sanitaria por el coronavirus lo ha paralizado todo. La información del BOE -que firma la ministra de Defensa Margarita Robles- indica que Delgado Ramos pasará a desempeñar su nueva función en condición de “servicios especiales”. La Ley de Personal de la Guardia Civil establece los casos en los que eso es posible. Uno de ellos es cuando se “presten servicios en la Presidencia del Gobierno o en los Gabinetes de Ministros y Secretarios de Estado en puestos orgánicos no relacionados específicamente con la defensa o la seguridad ciudadana”.
Las fuentes consultadas discrepan acerca de si este puesto de asesor de la DGT es un puesto relacionado con la seguridad ciudadana. Algunas voces críticas consultadas creen que hubiese sido más correcto pedir una excedencia, que tienen un mínimo de dos años, a riesgo de que un cambio de Gobierno antes de tiempo le dejase sin nada. Delgado Ramos es funcionario del subgrupo C1 y el puesto de vocal asesor Nivel 30 en el Ministerio del Interior es de A1, el máximo.
Por ello lo que se ha hecho para salvar este obstáculo es concederle una plaza de Gabinete, reservada a personal eventual, según explican fuentes conocedoras del nombramiento. Son puestos de asesoramiento de libre designación que no requieren titulación alguna. Delgado pasará a tener acceso a una remuneración muy superior a la que marca su condición actual de funcionario.
Estaba a la espera de destino
Durante su etapa como diputado, Delgado Ramos ya había estado en condición de servicios especiales. A diferencia de los altos rangos del Cuerpo, en su caso no se le reserva la plaza que tenía antes. Durante estos meses se encontraba a la espera de destino en cualquier punto de la geografía española.
Un alto mando de la Guardia Civil considera que los supuestos de servicio especial prohíben a un Guardia Civil ejercer de asesor en Interior o en la Secretaría de Estado de Seguridad y apunta a una “prevaricación administrativa”. “Debería haber ido en situación de excedencia”, opina. Por su condición de miembro d la AUGC fue vocal del Consejo de la Guardia Civil, el órgano de comunicación entre la Administración y las asociaciones profesionales.
Un excompañero suyo en aquellos tiempos defiende su labor a la hora de velar por las condiciones de los agentes, pero reprocha sus actuaciones como diputado, pero añade que “hubiese sido más lógico que para la DGT se hubiese nombrado a un guardia civil de Tráfico". "Que yo sepa nunca ha ocupado un destino en ese ámbito”, dice. “Se ha buscado una puerta giratoria como las que él criticaba después de perder el escaño”, sostiene un cabo primero de la Guardia Civil.
Relación con Iglesias
Juan Antonio Delgado Ramos fichó por Podemos en 2015 después de muchos años como portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil. Eso le permitió conocer diferentes ámbitos de la Guardia Civil, aunque nunca ha tenido un puesto relacionado con la Agrupación de Tráfico, materia en la que ahora va a asesorar. Sus destinos han sido el aeropuerto de Barcelona y el puesto de la Guardia Civil de Barbate (Cádiz). Sus reivindicaciones en la AUGC iban siempre en la línea de desmlitarizar la Guardia Civil y abrir la puerta del cuerpo a los sindicatos.
De ideas progresistas, comenzó a ser un habitual en los programas de televisión presentados por Pablo Iglesias. El actual vicepresidente del Gobierno apelaba a su amistad con el guardia civil para sacudirse su imagen de antisistema o cuando se le criticaba por tener un discurso crítico hacia las fuerzas armadas o en ocasiones cercano a la izquierda abertzale. Delgado Ramos siempre se mantuvo fiel a Iglesias dentro de las luchas intestinas por las que ha atravesado ese partido. Eso a pesar de que siempre figuró como independiente o a que en algunos casos concretos marcó un discurso propio.
Desde el minuto uno hemos estado con las víctimas de Alsasua, con los Guardias Civiles agredidos y sus parejas.Lo demás son manipulaciones.
— Juan Antonio Delgado Ramos (@JA_DelgadoRamos) March 22, 2017
Un ejemplo de ello fue tras el apoyo que Podemos prestó a los familiares de los detenidos en Alsasua por agredir a dos guardias civiles. “Desde el minuto uno hemos estado con las víctimas de Alsasua, con los Guardias Civiles agredidos y sus parejas.Lo demás son manipulaciones”, publicó en su cuenta personal de Twitter. Aquellas palabras distaban mucho del papel que su formación había jugado en el conflicto.
Las fuentes consultadas explican que el nombramiento del exdiputado morado es una imposición de Moncloa y del Gobierno de coalición de PSOE y Podemos que no ha caído bien en el Departamento que dirige Grande-Marlaska. Se le ha buscado un destino en Tráfico para separarlo de ámbitos más sensibles dentro de la seguridad del Estado, añaden estas fuentes.