¿Víctima o villano? ¿Honrado hombre de negocios o experto en blanquear dinero del narcotráfico? ¿Pujante banquero 'online' o peligroso cibercriminal? La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional celebra este lunes la vista en la que debe decidir si extradita a Estados Unidos a Arthur Budowsky, un norteamericano de origen ucraniano y nacionalizado costarricense al que las autoridades de Washington acusan de blanquear dinero del crimen a través de su ciberbanco y los 'bitcoins', la moneda 'virtual' que amenaza la hegemonía de las divisas tradicionales. Detenido en el aeropuerto de Barajas el pasado 28 de mayo, Budovsky se declara inocente y acusa a EEUU de tejer una falsa maraña de acusaciones y pruebas para expulsarle de un mercado financiero, el de las transacciones internacionales, en el que su éxito amenazaba a grandes multinacionales. Si la Justicia española y, posteriormente, el Gobierno de Mariano Rajoy acceden a la petición estadounidense, el ciberfinanciero se enfrentará al otro lado de Océano Atlántico a un juicio en el que puede ser condenado a 20 años de cárcel.
Washington acusa a Liberty Reserva, el 'ciberbanco' de Budovsky, de blanquar dinero. Él lo niega y asegura que EEUU sólo quiere 'sacarle' del negocio de las transacciones internacionales
El caso Budovsky arrancó en EEUU hace años, cuando la Fiscalía de Nueva York inició una investigación sobre Liberty Reserve, el ciberbanco que el ahora detenido había creado en 2006 en Costa Rica. Sospechaba que dicha entidad 'online' funcionaba realmente como un sistema de pago electrónico usado por delincuentes a los que les facilitaba blanquear sus ganancias. Las autoridades de Washington consideraban que los requisitos que exigía la entidad 'online' a sus clientes --para tener una de sus cuentas sólo era necesario proporcionar un nombre, una fecha de nacimiento y una dirección de correo electrónico-- abría de par en par las puertas a los criminales para traspasar sus fondos de un extremo al otro del mundo de modo casi instantáneo. Su éxito llego a ser tan importante que a través de Liberty Reserve se llegaron a realizar más de 55 millones de transacciones diarias por un importe que superaba los 6.000 millones de dólares (4.600 millones de euros), según destacaban las autoridades norteamericanas tras su detención. El portal de Budovsky cobraba un 1% en cada transacción.
Un negocio que se vino abajo el pasado mes de mayo, cuando el ciberbanquero hizo escala en Madrid procedente de Marruecos camino de Holanda, donde residía., En ese momento, la Policía española, que había recibido días antes una petición de detención por parte de las autoridades estadounidenses, detuvieron a Budovsky en el aeropuerto de Barajas cuando se encoentraba junto a su 'número 2', Azzeddine el Amine, un marroquí nacionalizado ctambién ostarricense. Paralelamente, eran detenidos en Nueva York y Costa Rica otros cinco responsables de la entidad, entre ellos el ciudadano ruso Maxim Chukharev, arrestado en el país centroamericano. La petición de extradición cursada contra éste ya provocó el pasado mes de octubre a Washington un problema diplomático con las autoridades de Moscú, que se resistían a que una nacional suyo fuera sometido a la jurisdicción de EEUU sin haber estado, tan siquiera, en este país.
La Fiscalía, a favor de la extradición
Ese problema, sin embargo, no ha surgido en España, donde las autoridades de Madrid se han mostrado en todo momento en consonancia con las de EEUU. De hecho, el Ministerio del Interior emitió el mismo día del arresto de Budovsky una nota de prensa en la que se califica a Liberty Reserve como "la plataforma financiera del cibercrimen". Por su parte, la Fiscalía de la Audiencia Nacional se ha mostrado en todo momento partidaria de que Budovsky sean extraditado a Estados Unidos como supuesto autor de un delito de blanqueo de dinero, el único de los tres de los que le acusan las autoridades de Washington que se encuentra recogido en la legislación española.
Sin embargo, el empresario arrestado está dispuesto a dar la batalla para evitar su entrega y lleva meses asegurando desde la cárcel madrileña donde está recluido que es víctima de las 'maquinaciones' de las autoridades de EEUU para 'sacarle del mercado' de las transacciones cibernéticas. De hecho, afirma que éstas no han dudado en "manipular" pruebas en su contra e, incluso, en presionar a Madrid para vencer posibles resistencias a su extradición. Sus abogados en nuestro país aseguran haber encontrado hasta 17 "falsedades" en la documentación presentada por las autoridades estadounidenses para conseguir que la Audiencia Nacional dé luz verde a su petición de entrega.
"Sin pruebas"
Así, en contra de la afirmación de la Fiscalía neoyorquina de que Liberty Reserve era una gran tapadera de blanqueo donde los delincuentes campaban a sus anchas sin trabas, Budovsky asegura que su ciberbanco denunciaba los movimientos sospechosos de dinero a las autoridades de los países que se podían ver afectados por ellos, entre ellos Reino Unido, Bulgaria e, incluso, los propios Estados Unidos. También afirma que Washington no ha aportado a las autoridades de Madrid gran parte de las pruebas que asegura tener -y que el detenido niega que existan-- sobre los lazos que existencon su territorio para respaldar su petición de extradición. Entre ellas, alega la falta de los documentos que demuestren la supuesta fundación del ciberbanco en Nueva York, la existencia de 250.000 usuarios asentados en su territorio o una presunta relación con una trama de falsificación de tarjetas de crédito desmantelada el año pasado.
La defensa de Budovsky asegura que EEUU esperó a que el 'ciberbanquero' estuviera en España para ordenar su arresto sabedor de que nuestro país accedería a su extradición
La defensa del ciberbanquero asegura que en el caso de Budovsky confluyen elmentos que le asemejan a dos casos que han tenido enorme repercusión mediática. En primer lugar, con el de Kim Dotcom, el fundador del portal de descargas Megaupload, reclamado por Estados Unidos a Nueva Zelanda y actualmente en libertad condicional a la espera de que la Justicia del país oceánico decida si lo extradita por los delitos de piratería informática, lavado de dinero y asociación criminal de los que le acusan las autoridades norteamericanas. Mientras ese momento llega, ya ha montado una nueva web de almacenamiento e intercambio de archivos.
El segundo es el de Hervé Falciani, el 'Robin Hood' de la banca suiza, quien se desplazó a España desde Francia por recomendación de las autoridades de Washington ante el convencimiento de que nuestro país no accedería a las pretensiones de la Justicia helvética de extraditarle, como así ocurrió. "España se ha convertido en una 'jurisdicción de conveniencia' para EEUU, que hace todo lo posible para que las personas en busca y caputra sean arrestados en estados que no ponen objeciones a sus reclamaciones, como el nuestro", añade uno de los abogados defensores. Víctima o villano, pujante banquero 'online' o peligroso cibercriminal, el futuro judicial de Arthur Budovsky se decide a partir de este lunes en la Audiencia Nacional.