Un fallo técnico provocó esta madrugada que el tren Ouigo 6810 con salida Barcelona-Sants y destino Madrid-Puerta de Atocha se detuviera a la altura de Alhama de Aragón, con 960 pasajeros a bordo, que esperaron durante horas a que se solucionara la avería y se retomara su trayecto. Según ha detallado la compañía este martes, tras la avería que hizo que el tren quedara sin suministro eléctrico, los técnicos de la compañía intentaron dar con una solución in situ, pero finalmente tuvieron que hacer retroceder el tren hasta Calatayud.
Allí, el tren se dividió para que la parte que no estaba averiada retomara el trayecto hacia su destino cuanto antes con sus pasajeros a bordo. A su vez, otro tren de Ouigo acogió a los viajeros de la unidad averiada para poder retomar el camino.
El primer tren llegó a Madrid hacia las 4:30 de la mañana y el segundo recogió a los que estaban en Calatayud cerca de las 5:00 y llegó a Madrid sobre las 6:30. Inicialmente la llegada estaba prevista para las 23.30 del lunes.
A través de las redes sociales, los pasajeros afectados pedían soluciones porque desconocían los detalles de lo ocurrido y se quejaban de que habían estado "sin agua, sin aire (acondicionado) y en ocasiones sin luz" dentro del tren, hasta que finalmente se les permitió salir a las vías.
La compañía, que ha pedido disculpas por los inconvenientes ocasionados, ha señalado que irán más allá de la política de compensación y devolverán a todos los pasajeros el 100% del billete, además de un 200% adicional canjeable a través de la aplicación móvil y la página web.
La tripulación también atendió a los viajeros y repartió botellas de agua a bordo, según ha detallado la firma, filial de la empresa ferroviaria estatal francesa SNCF que desde hace un año opera servicios de alta velocidad en España compitiendo con Renfe.