España

Botella se carga las ferias gastronómicas, un oscuro negocio que estaba invadiendo las calles de Madrid

Ha aprobado una nueva ordenanza que regula la proliferación desordenada de estas actividades y que había provocado la protesta por escrito de más de cuarenta asociaciones de empresarios.

El Ayuntamiento de Madrid, que preside Ana Botella, ha hecho caso a los empresarios y ha acabado con las llamadas "ferias de gastronomía" que invadían decenas de calles en un negocio consentido por las juntas de distrito.

Estas ferias eran en realidad bares y restaurantes encubiertos que habían proliferado en la ciudad frente a muchos establecimientos que pagan sus impuestos y tasas y están sometidos a un fuerte control sanitario. En los últimos años se habían creado empresas que se dedicaban a la organización de estos certámenes que han hecho rico a más de uno de los promotores.

Un empresario, con buenos contactos, en la junta correspondiente, hacía la petición para montar una de estas ferias. Una vez obtenida la autorización, subcontrataba los puestos y los tenía cerca de un mes haciendo la competencia desleal a los establecimientos de la zona.

Personas que conocen este sistema hablan de "zonas de sombras" en algunas de las empresas que habían montado una organización que bajo dominación similar actuaba en muchos barrios.

Los empresarios, hartos de estas prácticas, entregaron hace algunos meses un escrito avalado por 48 asociaciones en el que exigían a la alcaldesa Ana Botella que terminara con "una competencia totalmente desleal".

"Nosotros pagamos impuestos, tasas, nos inspeccionan, nos abren expedientes y estas ferias son un fraude, pues ofrecen lo mismo que nosotros sin apenas invertir y pagar tasas", afirmaba un empresario afectado.

Poner fin al negocio

El Ayuntamiento sabía de algunas denuncias de irregularidades y ha optado por regular estos mercados y prohibir este tipo de ferias negocio. Serán los propios comerciantes de la zona los que, si lo autorizan, podrán sacar sus bares a la calle ocasionalmente, "pero se acabó este oscuro negocio", dijo un concejal a Vozpópuli.

Sí que se podrán montar mercados, pero de otro tipo de productos (regalos, bolsos, artesanía...). El Ayuntamiento aprobó recientemente una ordenanza de dinamización del comercio en la que incluye la nueva normativa que regulará esta actividad.

En lenguaje oficial se adaptan las normas "para dar cabida en los espacios públicos a nuevas prácticas comerciales y acciones de promoción". "El Ayuntamiento –explican- podrá expedir autorizaciones especiales a los comerciantes gestores de los mercados municipales, asociaciones empresariales o zonas de iniciativa emprendedora, para que puedan desarrollar conjuntamente su actividad en plazas, calles y otros espacios públicos".

"En cuanto a la venta ambulante, la regulación se mejora, al estilo de las grandes capitales del mundo, para que pueda autorizarse la venta de determinados alimentos envasados en puestos autorizados en la vía pública, siempre que se respete la normativa en materia de higiene, sanidad, calidad y seguridad alimentaria".

El Ayuntamiento informa de que "el régimen de autorizaciones estará sujeto a licitación que se ajustará estrictamente a criterios de interés público, concurrencia y objetividad". Es decir, se acaba con la adjudicación tras una petición individual o colectiva y se va al concurso público y transparente.

El propio Ayuntamiento dijo en un comunicado que "se pretende así frenar la proliferación desordenada de estas actividades en Madrid". La junta de Centro, una de las más afectadas, ya ha convocado un concurso con estos criteros objetivos que será fallado próximamente.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli