El uso de la mascarilla en las Islas Baleares será obligatorio a partir del fin de semana en los espacios públicos, sin importar la distancia de seguridad. No llevar la mascarilla supondrá una sanción de 100 euros.
El Govern ha decidido tomar la misma decisión que Cataluña como respuesta a los nuevos rebrotes en la isla, causados por las continuas aglomeraciones, fiestas ilegales y botellones. Esta medida se aprobará hoy en el Consell de Govern y será vigente tras su publicación en el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB).
Estarán obligados a llevar la mascarilla tanto los residentes como los turistas, y también los niños a partir de los seis años. Hasta ahora su uso era necesario cuando la distancia de seguridad establecida por el ministerio de Sanidad no se podía respetar, así como en establecimientos cerrados.
Posibles excepciones
La modificación de la 'nueva normalidad' en el archipiélago balear aún no especifica las excepciones del uso de la mascarilla, pero se plantea eximir el uso de mascarillas en lugares como playas y piscinas, y al realizar actividades deportivas. Además, tampoco están establecidos los límites de su uso en aquellos trabajos más expuestos al contacto con otras personas o la regulación de su uso en terrazas.
Ahora, en este escenario, queda por saber cómo afectará al turismo de las islas el uso de la mascarilla en la playa. Incertidumbre en el sector más importante de las islas.
