Varios enfermos son trasladados a la Comunidad de Madrid para poder cubrir correctamente sus necesidades sanitarias, debido a que hay tratamientos que solo son atendidos en la capital. Casa Avintia se dedica a dar alojamiento a los familiares de estos pacientes desplazados. La Fundación se encuentra actualmente en obras, triplicando su capacidad para poder acoger hasta a 30 familias a la vez. Se espera que los nuevos módulos estén listos para finales de este 2024.
La idea de este hogar "nace en 2017, cuando Grupo Avintia cumple 10 años y decide devolver a la sociedad parte de lo que esta le ha dado", comenta Carmen Varela a Vozpópuli, patrona fundadora y directora de la Fundación. Varela explica que este proyecto "surge de una necesidad: todas las personas desplazadas de otras comunidades autónomas porque tienen a alguien ingresado en una UCI o en un hospital del Servicio Madrileño de Salud y no tienen donde alojarse".
Señala así los altos precios de la capital a los que no todo el mundo puede hacer frente. Además, "en una habitación normal de planta de hospital siempre hay una cama, un sofá de acompañante, pero las UCIs están mucho más limitadas y no hay este servicio", indica la patrona de la Casa Avintia. Y "aunque la familia pueda hacer un esfuerzo económico para pagar algo, nadie te alquila una casa por un tiempo indeterminado", añade.
La Fundación recibe donaciones que le permiten la renovación y actualización de las instalaciones. La aportación más reciente ha sido por 6.000 euros de la mano de la constructora RUESMA. Asimismo, hacen colaboraciones con distintas empresas.
Uno de los últimos convenios ha sido firmado con Bastardo Hostel. Gracias a este acuerdo, las familias que tengan que regresar a la Comunidad de Madrid por una revisión dispondrán de diez noches de alojamiento gratuito y otras veinte con un descuento del 50% -con un hospedaje máximo de dos noches-. "Quisimos darle continuidad a estas familias que han estado alojadas en la casa", comenta Carmen Varela a Vozpópuli.
Como ejemplo, Carmen nos cuenta acerca de "una familia que vino de Galicia, estuvo con nosotros como tres meses, y luego tuvo que volver a revisión del niño. Tenían que estar en el hospital a las 8 de la mañana". Debido a la distancia entre las dos comunidades, tendrían que salir de madrugada teniendo que "darle una medicación" al niño, "es muy complicado".
El apoyo entre familias en Casa Avintia
Desde su inauguración en noviembre del 2022 hasta la fecha han atendido a 167 familias y 368 personas. La mayoría de estos pacientes provienen de Castilla-La Mancha (donde destaca Albacete), Murcia, León y Extremadura, según indica Carmen Varela. "Hemos tenido familias también de Albania, de Portugal, de Francia y de Italia", añade.
Estas familias son seleccionadas por los trabajadores sociales "cuando necesitan un recurso residencial como este". La renta y el tiempo de estancia influyen para decidir si las familias son aptas para este servicio. "No es lo mismo un bebé prematuro de 26 semanas que está en incubadora, que, a lo mejor, un niño al que le han hecho una cirugía que iba a estar una semana", ejemplifica la directora de Casa Avintia.
Aunque la media de estancia por familia es de 28 días, hay casos cuyo alojamiento es mayor. "Tuvimos una familia que estuvo ocho meses viviendo con nosotros y otra que estuvo seis meses", comenta Carmen Varela, además de indicar que ha habido varios alojamientos de cuatro y cinco meses.
"Un paciente puede ser derivado a las unidades de neonatología, de pediatría o de quemados en un hospital madrileño", señala Carmen Varela a Vozpópuli, entre otros sectores de la medicina. Resalta los casos por embarazo de riesgo que "cada vez estamos viendo más". De hecho, en esta situación acudió María a la Casa Avintia, junto a su marido Andrea desde Murcia.
"A la semana doce me detectaron una cardiopatía, un embarazo de riesgo, y, en consecuencia, nos dijeron que no podían tratar a la niña", cuenta María junto a su hija Martina. Desde el hospital donde estaba siendo tratada le recomendaron Madrid como el lugar "idóneo" para completar el tratamiento, pero, no tenían "alojamiento, ni medios económicos para ello".
No obstante, los trabajadores sociales en el hospital de Murcia al que acudía le ofrecieron Casa Avintia y fue "un alivio". En una situación similar se encontraba la mujer de Abraham. Vinieron a Madrid desde Aranda del Duero para que ella se hiciera unas pruebas y, "de sopetón, cesárea", comenta Abraham a TVE. "Dormíamos... entre comillas. No dormíamos", dice a la reportera. A través de una asistenta descubrió Casa Avintia, donde estuvo alojado mientras su mujer estuvo ingresada.
Los padres de Martina solo tiene "palabras de agradecimiento a la Fundación". María comenta que entre las familias que se encuentran en el hogar "han hecho piña". Y así lo confirma Carmen Varela.
"Según lo que nos cuentan todas estas familias, el estar juntos y tener esa zona compartida les ayuda mucho", comenta la directora de la Fundación Avintia. "Hacen mucha terapia psicológica entre ellos", añade. Los familiares están todo el día en el hospital con sus seres queridos y coinciden en la hora de la cena. "Están deseando llegar a la casa para hablar unos con otros y ver cómo ha ido. Todos se reúnen y preguntan, ¿qué tal tu familiar hoy? ¿Qué tal esto? ¿Cómo ha ido?", dice Varela.
"Entre ellos se ayudan mucho porque están todos en la misma situación", dice la patrona de Casa Avintia. "Parece que nadie te entiende a no ser que esté pasando por lo mismo que tú en ese momento".
pinar010
Qué gran idea, qué gran actuación y qué gran trabajo. Encomiable.