Doce muertes violentas en Barcelona desde el inicio del año, peleas a machatezos y katanas a plena luz del día, robos y detenciones masivas de carteristas no han sido suficientes para que Ada Colau y Jaume Collboni, alcaldesa de Barcelona y primer teniente de alcalde, respectivamente, no aplacen sus vacaciones y sitúen a Laura Pérez como la alcaldesa accidental de la Ciudad Condal.
Ambos se han tomado un periodo de descanso pese a formar gobierno hace apenas mes y medio, y tan solo tres meses después de los comicios. La reelegida para el cargo de alcaldesa llegó a decir que es un gobierno "fuerte, de izquierdas, cohesionado y equilibrado" y que no podría ni tener los cien días de gracia. También aseguraba que no podría hacer ni vacaciones porque Barcelona no descansa.
Tanto Colau como Collboni sí han tomado este descanso al designar a la concejal Pérez como alcaldesa accidental. Un hecho que no ha pasado desapercibido para la oposición. Tras colgar el cartel de cerrado, Colau volvió a Barcelona para el homenaje a las víctimas de los atentados del 17-A, pero inmediatamente después tomaba rumbo a una lujosa urbanización del Cabo de Gata (Almería). Fuentes del PSC han asegurado que Collboni se ha tomado un "merecido descanso" por el trabajo realizado en los últimos meses.
Mientras, en la Ciudad Condal se han vuelto a registrar hechos violentos, como el ocurrido ayer en una nueva pelea, esta vez a machetazos, en plena calle. Desde julio, la inseguridad en Barcelona ha ido en aumento, con ocho asesinatos y tres agresiones sexuales, junto con los robos violentos y reyertas.
Sobre la ausencia de Colau y Collboni en Barcelona, el concejal del PP Óscar Ramírez ha considerado que ambos "deben estar ya en el Ayuntamiento", más cuando Colau es la responsable de la situación.
Colau es la responsable de esta situación
"Preocupante". Así ha descrito la situación de inseguridad en Barcelona el popular. "Es la constatación del fracaso de las políticas de Colau desde el inicio de su mandato, en 2015", ha afirmado en declaraciones a Vozpópuli. Colau ha negado hasta ahora que exista una crisis de inseguridad, pero hasta su teniente de alcalde Albert Batlle ha desmentido a la propia alcaldesa. "No había coordinación", ha resumido Ramírez, que propone como solución más agentes de policía local y más presencia policial en las zonas conflictivas y no únicamente un incremento del número de miembros de la Guardia Urbana. En este sentido, no ve inconveniente alguno en movilizar a agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil para contener la oleada de violencia en la Ciudad Condal. A su juicio, los delincuentes no temen a los agentes, y éstos deben jugarse su propia integridad física en cada actuación en una de estas zonas conflictivas. "La falta de autoridad" es uno de las principales causas de que los delincuentes campen a sus anchas en las calles.
"Las vacaciones no pueden ser una justificación"
Con mayor contundencia se ha mostrado Elsa Artadi. "En política y, sobretodo en cargos de la responsabilidad de una alcaldía y dirección de una ciudad como Barcelona, las vacaciones no pueden ser una justificación", ha afirmado la cabeza de lista de JxCat en el Ayuntamiento de Barcelona en declaraciones a este medio. "Se está al servicio de la ciudadanía las 24 horas, los 365 días del año", ha enfatizado, al tiempo que ha subrayado que "las crisis se abordan con respuestas inmediatas".
"Se puede estar de vacaciones, pero lo que no pueden hacer los máximos dirigentes de Barcelona y su Ayuntamiento es estar ausentes de la ciudad", ha ahondado. "Esta es la percepción que trasladan Ada Colau y Jaume Collboni con su actitud y práctica desaparición". Con todo, ha comentado que "la sensación es que Colau está desaparecida y ausente de su responsabilidad desde el día siguiente al de su investidura, en que los votos de Manuel Valls le permitieron repetir como alcaldesa".
Respecto a la inseguridad, ha asegurado que va en aumento desde hace años en la Ciudad Condal, pero se "ha agravado desde este verano". El mismo Batlle "ha reconocido que la capital catalana está inmersa en una crisis de seguridad".
"Todos los días son importantes, y dejar que éstos vayan pasando sin que la alcaldesa tome decisiones y aborde la cuestión es, cuando menos, irresponsable", ha enfatizado, mientras pide la vuelta inmediata de Colau a Barcelona "porque necesitamos respuestas claras y contundentes a un problema duro de inseguridad, que afecta directamente a mucha gente y a la percepción de una mayoría de la ciudadanía barcelonesa".
Los vecinos se sienten abandonados y desprotegidos y eso es inadmisible
"Colau lleva cuatro años sin comparecer cuando se tratan asuntos que afectan a la seguridad de la ciudad", ha considerado Mari Luz Guilarte, presidenta de Ciudadanos en Barcelona, en declaraciones a Vozpópuli. "Colau -continúa- no solo ha estado ausente este verano si no que sus políticas en materia de seguridad refleja esa voluntad de ausencia total".
"Es indignante que ni Colau, ni Collboni hayan encontrado ni un momento para reunirse y escuchar a los vecinos y comerciantes que reclaman soluciones desde hace años ante la creciente inseguridad en Barcelona y sin embargo sí que han invertido tiempo y recursos para ceder ante las presiones del colectivo de venta ilegal", ha aseverado.
"Ha abandonado a la ciudadanía"
"La jefa de seguridad de la ciudad ha abandonado, de manera totalmente irresponsable, a la ciudadanía", ha afirmado la líder municipal de la formación naranja, que ha criticado a Collboni por esperar un año más para solucionar el problema de la inseguridad en Barcelona. "Ante la creciente inseguridad ciudadana que sufre Barcelona, los vecinos se sienten abandonados y desprotegidos y eso es inadmisible", ha puntualizado.
"Colau y Collboni no dan la cara ante el problema, que es lo mínimo exigible dada su responsabilidad. Si no son capaces de resolver esta problemática, como estamos viendo, lo mejor que pueden hacer es asumirlo cuanto antes por el bien de todos los barceloneses", ha dicho.
El Gobierno Colau-Collboni sigue centrado "en la gestualidad sin llevar a cabo un plan integral de seguridad" y "ha convertido a Barcelona en la ciudad más insegura de España y que ya ha trascendido nuestras propias fronteras". Su responsabilidad es la de poner "los medios necesarios para proteger a todos los barceloneses y no estar ausente como han hecho durante todo el mes de agosto". Para solucionarlo, ha pedido "determinación" y un "mensaje claro de tolerancia cero desde el Ayuntamiento".