ERC y el PSC ahogan la solidaridad de Cataluña con el resto de España y crearán selecciones propias

Salvador Illa cede a los republicanos para poder atar los 20 diputados que necesita para ser investido como próximo presidente de la Generalitat. Aunque la sombra del retorno de Carles Puigdemont sigue creciendo a medida que se acerca la fecha de investidura, los socialistas han logrado satisfacer los intereses de sus socios, si bien marca varias líneas rojas soberanistas nunca antes vistas en Cataluña.

Acuerdo Erc-psc (1) by grodriguez

El preacuerdo alcanzado entre el PSC y ERC establece que la aportación catalana a la financiación del Estado, que integra la aportación por el coste de los servicios que el Estado presta en Cataluña, quedará "limitada" por el principio de ordinalidad en un próximo modelo de financiación catalana: "Las contribuciones de las comunidades autónomas por habitante, ordenadas en una escala de mayor a menor, deben mantener el mismo orden que en la escala de lo que reciben", según el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.

El texto recoge los principios del nuevo modelo de financiación de la Generalitat basado "en la negociación bilateral con el Estado", y fija que sea el Govern el que gestione, recaude, liquide e inspeccione todos los impuestos de Cataluña, y aumentar sustancialmente la capacidad normativa en coordinación con el Estado y la UE.

Para formalizar la nueva financiación, el texto concreta que será necesario formalizar este pacto durante el primer semestre de 2025 en la comisión bilateral entre el Gobierno y la Generalitat. De esta forma, Cataluña tendrá topada la solidaridad con el resto del Estado y las CCAA tal y como explicita el documento: "Las contribuciones de las comunidades autónomas por habitante, ordenadas en una escala de mayor a menor, deben mantener el mismo orden que en la escala de lo que reciben. Se trata de un cambio estructural al sistema de financiación que, en caso de no adoptarse dentro del 2025, requerirá medidas compensatorias".

El principio de ordinalidad rige que ninguna CCAA reciba menos por habitante que otras autonomías que hayan aportado menos. Por tanto, si España no respetase esa ordinalidad, deberá compensar a Cataluña con "medidas compensatorias".

Impulso del catalán

En lo referente a la carpeta del catalán, clave para ERC, el PSC reconoce un retroceso del uso social de la lengua y pacta con los republicanos la creación de un Departamento de Política Lingüística con un "plan de acción transversal", un Pacto Nacional por la Lengua que fija el calendario de ejecución presupuestado por el Govern y el uso del catalán en las instituciones. En el ámbito educativo, el pacto refuerza el catalán como lengua vehicular y de aprendizaje en el sistema educativo así como la lengua de acogida del alumnado recién llegado.

El acuerdo refuerza la competencia de Educació para orientar a los centros de acuerdo con los datos sociolingüísticos disponibles, en "aplicación de metodologías de inversión lingüística en lengua catalana por tal que el alumnado cuya lengua habitual no sea el catalán tenga a oportunidad de aprenderlo en igualdad de condiciones".

Se mantienen las embajadas

En cuanto a la Acción Exterior de la Generalitat, ambos partidos coinciden en la necesidad de la proyección europea e internacional de Cataluña por lo que acuerdan mantener el Departament para este fin así como el Programa de apoyo al cuerpo consular establecido en Cataluña. El acuerdo prevé culminar la creación del Cuerpo de Acción Exterior y se establecerá un plan de implementación de sus funcionarios y funcionarias en todos los departamentos. En cuanto a la red de 'embajadas', se consolidará y ampliará la red de delegaciones, con especial atención a Latinoamerica y a Asia y reforzará la Acción Exterior en África.

Promoción de las selecciones catalanas

El acuerdo establece que "teniendo en cuenta la vitalidad del deporte catalán federado" se reconozca en todos los niveles. "En este sentido, se promoverá la proyección internacional de las federaciones deportivas catalanas y el reconocimiento de las selecciones deportivas catalanas", reza el texto. Para ello el pacto prevé la constitución de una Oficina del Gobierno adscrita al Consell Català de L'Esport para promover las selecciones que puedan optar a la participación directa en el ámbito internacional por el hecho de "haberse constituido antes que la federación estatal correspondiente y de acuerdo con el arraigo social e histórico de Cataluña".