No llueve sobre Cataluña, donde los embalses ya están por debajo del 15% pero sí llueven críticas sobre el Govern. El pleno de este miércoles el conseller de Acció Climàtica, David Mascort, volvió a ser carne de cañón por la falta de previsión de la gravísima situación que atraviesa Cataluña en el acceso de recursos hídricos así como la deficiente gestión de la Agencia Catalana del Agua (ACA) en los últimos años. Mascort, ante el embate del PSC, anunció que se flexibilizarían las restricciones en gimnasios, piscinas de hoteles y recintos deportivos del Plan de Sequía. Fue atacado también por el remanente de 540 millones que el ACA mantiene sin ejecutar, aunque explicó que se trataba de un dinero "afectado", comprometido para actuaciones concretas.
El miércoles, la Generalitat y, en extensión, el organismo público responsable del ciclo del agua, el ACA, recibieron el varapalo del Instituto de Coordenadas de Gobernanza, una entidad especializada en la interacción entre gobernanza y la economía aplicada. El organismo criticó que se habían antepuesto decisiones políticas por encima de las técnicas, "gastando cuatro veces más en traer agua desde Sagunto" que en "promover infraestructura permanente" para abastecer el Area Metropolitana.
El vicepresidente de la entidad, Jesús Sánchez Lambás, criticó el impacto del aumento del canon del agua, de hasta un 40%, en los consumidores catalanes, permitiendo que el ACA recaude 100 millones más. Lamenta la falta de inversiones en las últimas décadas, con proyectos que quedaron enterrados tras la última sequía importante que atravesó Cataluña, en 2008. En el comunicado emitido, Lambás desmenuza los puntos de la vergüenza del ACA, que pasan de las fugas de agua aún por solventar a las ayudas municipales para obras de mejora en redes de abastecimiento sin materializar. No es de extrañar que el sector primario de Cataluña haya apuntado, cuando se desató la rabia del campo hace unas semanas, precisamente al ACA por su "falta de sensibilidad" hacia el sector y haya pedido la destitución de su director, Samuel Reyes.
Los barcos, sobre la mesa 6 meses antes del pacto con Ribera
Todo esto no es solo un análisis desde la consultoría u organismos de estudio, sino que el Govern ha dado a conocer datos que ratifican esta lectura de la realidad. Como explicó el conseller Mascort en una respuesta por escrito el pasado 28 de febrero a la pregunta del diputado socialista Ramon Espadaler sobre la fecha en la que el Servicio Meteorológico de Cataluña informó de la situación grave de sequía, se tuvo conocimiento oficial el 29 de septiembre de 2021. Fue entonces cuando el ACA declaró la entrada en prealerta por sequía en 8 Unidades de Explotación y el estado de alerta en el acuífero Carme-Capellades. Sin embargo, la Comisión Interdepartamental de Sequía (CIS), que pilota la gestión directa del plan de sequía con altos cargos de la Generalitat, se formó en agosto de 2022. Desde entonces, el CIS se ha reunido 21 veces hasta el día de hoy.
¿Qué se despachó en esas reuniones? el objetivo era "realizar el seguimiento de la evolución de los diferentes estados de la sequía y acordar las medidas necesarias, incluidas las de carácter normativo".
¿Qué se despachó en esas reuniones? el objetivo era "realizar el seguimiento de la evolución de los diferentes estados de la sequía y acordar las medidas necesarias, incluidas las de carácter normativo". A lo largo de estas sesiones se realizaron campañas comunicativas, envío de cartas a ayuntamientos para reuniones telemáticas, informes del rol de las piscinas municipales como refugios climáticos para un hipotético cambio en el Plan de Sequía, incrementos en las subvenciones para el abastecimiento municipal, la puesta en marcha de una mesa nacional para el agua y avisos a consistorios que superan el consumo. Este es el resumen hasta agosto de 2023.
En la sesión número 13, en septiembre de 2023, el CIS planteó el "inicio de los trabajos de las actuaciones que sean necesarias llevar a cabo para recibir barcos al puerto de Barcelona". Es decir, en un año de la constitución del organismo para hacer un 'plan de choque' de la sequía, en ningún momento se habló de la construcción de infraestructuras necesarias o acelerar las comprometidas, como las desalinizadoras del Foix y Tordera II que se aceleraron con un pacto estatal con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, hace apenas un mes. Seis meses antes de que el Ejecutivo español y catalán sellaran este pacto, el Govern priorizó esta medida en las reuniones del CIS, como se constata en el contenido de las reuniones.
Ninguna infraestructura queda recogida en ninguna sesión, como sí lo hace la opción de los barcos que, ahora se sabe, llegarán desde Sagunto. En el resto de reuniones se siguieron haciendo medidas técnicas como ampliaciones de grupos de trabajo con representantes de más departamentos, el estudio de medidas para ahorrar agua y solicitudes en noviembre de 2023 al ACA para que intensificara medidas adoptas en el estado de excepción del sistema Ter-Llobregat, con la reducción del límite de habitante cada día. Las últimas sesiones han sido más reclamaciones al ACA para la preparación de propuestas de los caudales mínimos en situación de emergencia para el abastecimiento de la población y las limitaciones para nuevas actividades mientras siga vigente el estado de emergencia.
