Si en las festividades familiares es mejor no hablar de fútbol o política, cuanto más se aplica esta máxima a la familia Aragonès. Jordi y Pere, el uno, historiador, nacionalista catalán de derechas, seguidor de Bannon y Thatcher y el otro, actual presidente de la Generalitat hasta que los resultados del 12 de mayo digan lo contrario, forjado en las juventudes de Esquerra Republicana y abogado. Una pugna que puede incrementarse a medida que se acercan las elecciones catalanas por el salto que puede dar el partido del 'Aragonés junior' a la cámara catalana.

El temor a Aliança Catalana, el partido de la xenófoba alcaldesa de Ripoll, Silvia Oriolls, en el independentismo de derechas es notorio. A eso responde la presión de Junts para que el Estado les ceda competencias en inmigración que ya se negocian con mediador en Ginebra, además del nerviosismo creciente por los votos que pueda usurpar al independentismo una cuarta lista secesionista.

¿Qué papel ha tenido Jordi Aragonés en este partido? pues lo fundó mano a mano con Orriols en 2020 y es considerado el 'cerebro' en la sombra que ha generado el fenómeno de Aliança Catalana, con el cargo de secretario de estudios y programas. Un año antes de su fundación, siendo ya Aragonés escudero de Orriols, defendió la entrada del Frente Nacional de Cataluña en el Consistorio de Ripoll, donde Orriols fue cabeza de lista.

La línea política de este partido, que se disolvió en 1990 y resurgió de sus cenizas en 2013, era marcadamente antimigratoria y nacionalista, el caldo de cultivo para la posterior fundación de una Aliança Catalana que sueña de Cataluña lo que Trump sueña con EEUU: hacerla 'grande' de nuevo, como el tan aclamado logan trumpista y con una política de hierro en contra de la migración. "El conservadurismo es la filosofía del vinculo afectivo. Nos aferramos sentimentalmente a las cosas que queremos y las queremos proteger en contra de su descomposición", reza la cita del filósofo tradicionalista Roger Scruton que abre el perfil de X del primo pequeño del presidente de la Generalitat.

El origen de los caminos 'aragoneses' es el mismo, si bien la bifurcación política es abrupta. Ambos primos son nietos del que fuera alcalde franquista de Pineda de Mar y uno de los fundadores de Alianza Popular, posterior Partido Popular, Josep Aragonés i Montsant. Josep, hotelero y empresario textil del Maresme amasó una fortuna y desempeñó un papel clave en la Transición como representante designado por Manuel Fraga de los conservadores de Reforma Democràtica de Catalunya (RDC), lo que permitió la fusión del grupo en el partido que dio origen al PP en 1977. En la muerte de Carrero Blanco, Josep le dedicó una emotiva esquela sumándose al "dolor que afligía a toda España".

Jordi, al contrario que Pere, se ha aferrado con fuerza a los orígenes familiares de la rama Aragonés. Orgulloso de la amistad de su abuelo con Fraga y su gesta por la integración de la RDC, cree en la liberación nacional de Cataluña como "un proyecto interclasista e ideológicamente plural que prioriza la supervivencia de la identidad catalana por delante de las pretensiones particulares de los partidos que se llaman independentistas", recogiendo una cita que apoya del profesor Jaume Reyner, que defiende Aliança Catalana como un "espacio civilizacional" que arraiga en la población por el discurso vacío de la izquierda woke. En esta línea, el primo de Aragonés venera a Jordi Pujol, a quien, como nacionalista, considera "el catalán más influyente del siglo XX", según expresó en un acto con el 'expresident' en 2020, y ha impulsado por este motivo la asociación Tagamanent-Construir Cataluña para dar a conocer su obra.

Avui el President Jordi Pujol compleix 93 anys. Per molts anys, president! ? pic.twitter.com/M1xuuAn9ad

— Jordi Aragonès (@jordiaragonesm) June 9, 2023

Posible entrada de Aliança Catalana en el Parlament

El partido de Orriols ha anunciado oficialmente que concurrirá al 12-M. En los últimos meses, su líder ha sido muy mediática por entorpecer el empadronamiento de los migrantes del municipio y por la multa de 10.000 euros que recibió por expresar que el islam era incompatible con los valores occidentales. A pesar del cordón sanitario de los medios autonómicos, la proyección del partido es optimista valiéndose del desgaste político y los problemas sociales tales como la violencia en los barrios, la pobreza y el paro, una retórica de la que también se nutre Vox. "Si importamos tercer mundo, viviremos en el tercer mundo", ha expresado recientemente el primo pequeño de Aragonés.

Así las cosas, el presidente de la Generalitat es tajante (con su primo entre líneas). Durante el desayuno informativo en Madrid en el que expuso el plan de financiación singular mediante el cual la Generalitat se haría con el 100% de los tributos, 'Aragonés senior' expresaba que la sociedad catalana no es inmune a la extrema derecha, la xenófoba. El presidente de la Generalitat pidió a los partidos que no utilizaran los "argumentos de la extrema derecha" para contrarrestarla en el intento de evitar una hipotética entrada en el Parlament de Aliança Catalana.

El uno nieto de Josep, el otro nieto de Antonio y Juana

En contra de los argumentos de su primo en lo referente a la inmigración, y haciendo también alusión a sus orígenes, el presidente de la Generalitat expresó entonces en el desayuno que sus abuelos eran de Almería y le hablaban en catalán porque se sentían "plenamente identificados con Cataluña" por blindarles las oportunidades que no habían podido tener. Claro que no se refería a su abuelo paterno, sino a sus abuelos maternos, Antonio y Juana, oriundos de Palomares, Almería. En 2021 Pere recuperó el segundo apellido, Garcia, para recalcar ese orgullo a la vez que expresaba que estaba "bien acompañado en una lista tan diversa como el país".

Pere Aragonès i Garcia. Orgullós de ser nét de l'Antonio i la Juana, de Palomares, i d'estar ben acompanyat en una llista tan diversa com el país. https://t.co/cBploITY5b

— Pere Aragonès i Garcia ? (@perearagones) December 15, 2020

Sin embargo, en el mismo desayuno expresó que los andaluces no podían limitar el avance de las negociaciones para el cupo catalán, porque ese marco de decisión solo podía ser bilateral con el Estado, además de recalcar que la contribución de Cataluña al Fondo Interterritorial será temporal. Los orígenes almerienses de Antonio y Juana no parecían entrar mucho en la ecuación. En conclusión, Jordi y Pere, las dos Cataluñas. El uno impulsor de una nueva era pujolista antimigratoria, orgulloso del apellido paterno y estandarte del histórico empresariado textil catalán y Pere, aferrado a su raíz materna, orgulloso parcialmente de los orígenes humildes y 'charnegos' de sus abuelos andaluces y valedor de una república catalana tan diversa que la diversidad andaluza se diluye.

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