Carlos Mazón y Pere Aragonés mantienen la fractura institucional entre ambos gobiernos y ayer se puso de manifiesto en la visita del primero a Barcelona. El presidente valenciano cumplió su objetivo de visitar la ciudad condal para intercambiar impresiones con la patronal catalana y explicarles el proyecto económico, fiscal y administrativo que ha puesto en marcha en la Generalitat Valenciana.
El aviso previo a Pere Aragonés de esta visita ya se había cursado por parte del equipo de Mazón. Fue una mera información protocolaria pero sin repercusión en la agenda de ninguno de los dos presidentes autonómicos.
La jornada de ayer, donde Aragonés perdía la votación de los Presupuestos en el Parlament y adelantó las elecciones al 12 de mayo próximo, no era propicia para que hubiera un contacto con el jefe del Consell.
Ningún cargo del Govern
Ahora bien, según ha podido conocer Vozpópuli de fuentes del Gobierno catalán "en ningún momento" se plantearon enviar a alguno de los cargos del Ejecutivo autonómico al acto que Mazón iba a celebrar en la sede de Foment del Treball Nacional con lo más granado de la patronal catalana.
Tampoco hay previsto en agenda ningún contacto institucional a alto nivel en los próximos meses. Lo que revela esta situación es la distancia sideral que ahora separa a los dos Gobiernos autonómicos y que en las dos pasadas legislaturas, con Ximo Puig como interlocutor, era mucho menor.
Cierto es que Puig se reunió dos veces con Aragonés (una en Barcelona y otra en Valencia), pero en los dos últimos años de legislatura se distanciaron por las críticas del Gobierno catalán a que Volkswagen instalara su fábrica de baterías en Sagunto para beneficiar, según expresaron, a Puig como dirigente socialista y para "perjudicar a Cataluña".
Esa declaración y el gesto de Aragonés de no acudir en Barcelona a la jornada de reivindicación del Corredor Mediterráneo acabó por enfriar esas relaciones, aunque siempre hubo un canal de comunicación abierto.
Mazón, sin complejos
Ese clima es el que ha heredado Carlos Mazón quien no ha mostrado complejos a la hora de criticar a Pere Aragonés en su visita a Barcelona y con su antiguo jefe de gabinete y hoy concejal de Barcelona, Daniel Sirera, entre los asistentes.
Mazón confirma que “anima" a las empresas catalanas a que “vengan a la Comunidad Valenciana” y no como una OPA hostil –como se le planteó a primera hora en su entrevista en TV3– sino como promoción de los "avances en la bajada impuestos y la simplificación administrativa” que asegura estar llevando a cabo desde su llegada al Gobierno valenciano.
Más importante, sin embargo, fue escuchar lo que entre líneas, o abiertamente, expuso el presidente valenciano respecto a la diferencia de pareceres entre las políticas de ambos Gobiernos.
El debate con los miembros de la patronal muestra que Mazón no va a ceder en sus pretensiones. Cuando sale el tema del agua lo tiene claro y ayer recordó la "solidaridad" de llevar agua desalada desde Sagunto al puerto de Barcelona, eso sí, "de manera puntual y como remedio de emergencia".
Hay 11 trasvases del Ebro hacia diferentes lugares, uno de ellos a Francia, y sólo hay problemas cuando se plantea hacia la Comunidad Valenciana. Y del Tajo también se lleva más agua a Portugal de la que pide, pero sólo hay problemas cuando ese agua tiene que llegar a AlicanteCarlos Mazón
Ahora bien, lanzó un dardo claro a Aragonés y a quienes se niegan a que haya trasvases de agua hacia la Comunidad Valenciana. "Hay 11 trasvases del Ebro hacia diferentes lugares, uno de ellos a Francia, y sólo hay problemas cuando se plantea hacia la Comunidad Valenciana. Y del Tajo también se lleva más agua a Portugal de la que pide, pero sólo hay problemas cuando ese agua tiene que llegar a Alicante".
Esa falta de solidaridad de sus vecinos del norte fue expuesta crudamente por Mazón. También afeó que los partidos independentistas catalanes registraran una moción en el Senado para "boicotear y paralizar" la ampliación del Puerto de Valencia y "no parece de recibo", explicaba el presidente valenciano.
Esa falta de puntos de común acuerdo se ha revelado con más fuerza que nunca en la visita a Barcelona. Incluso cuando el presidente de la Cámara de Contratistas de Obra Pública de Cataluña le pedía a Mazón que hiciera fuerza para la ampliación del aeropuerto del Prat para que la Comunidad Valenciana tuviera un 'hub' logístico hacia Asia a través de la instalación de la ciudad condal, Mazón fue claro: "El aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández necesita una segunda pista y conexión ferroviaria, y el de Manises en Valencia está estrangulado y nos exponemos a un tapón turístico".
Sin paternalismos
Carlos Mazón defiende una "relación normal, sin paternalismos" entre Cataluña y la Comunidad Valenciana que sirva para que "haya una mejor conexión ferroviaria" porque a Madrid se tarda menos de dos horas desde Valencia pero a Barcelona casi cuatro. Y animó a Aragonés a "reivindicar el Corredor Mediterráneo en la parte valenciana con tanta intensidad como hizo en el tramo catalán".
"No vivir de espaldas" es lo que reclama el jefe del Consell para dos territorios con un enorme flujo económico. No en vano el 20% de los clientes de los catalanes son valencianos y el 19% de los clientes de los valencianos son catalanes. Juntando ambos territorio casi suman el 30% del PIB nacional.
El último 'recado' de Mazón a Aragonés llegó a cuenta de la decisión de la Generalitat catalana de asumir el Premio Guillem Agulló tras la negativa de las Cortes Valencianas a hacerlo en esta legislatura –por la oposición de Vox–. "Es oportunismo político" aseguraba Mazón en TV3.
Fuera de la agenda
La agenda del presidente valenciano, según han confirmado a este medio fuentes del Consell, contempla en los próximos meses reuniones con el presidente de la Región de Murcia (la próxima semana), el presidente de Andalucía, el presidente de Aragón, la presidenta de Baleares y ya se han producido contactos en Cuenca con el Gobierno de Castilla-La Mancha para agilizar la atención sanitaria a los pacientes de ambas regiones que residen en localidades limítrofes ambas Autonomías. Y con la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ya hubo una cumbre bilateral en noviembre pasado.
Encuentros con el Gobierno de Cataluña no hay en el horizonte y tras el adelanto electoral entra dentro de lo posible que Carlos Mazón y Pere Aragonés no mantengan diálogo alguno como máximos representantes de sus respectivos Ejecutivos autonómicos.
