La fractura en el seno del independentismo es imparable. Las llamadas a la unidad se desvanecen, al tiempo que la Asamblea Nacional Catalana incrementa su presión contra los partidos separatistas.
El canibalismo entre los sectores independentistas, con ERC como principal beneficiario y a donde apuntan ahora todas las críticas, ha llegado a un punto límite. La territorial de la ANC en Sant Cugat del Vallés, donde gobierna el pacto entre ERC, la CUP y el PSC para evitar que JxCat se hiciera con el Ayuntamiento el pasado 26-M, ha emplazado a la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, a conformarse como un partido político y tratar de hacer sombra a las dos principales formaciones separatistas y llegar "al poder".
La apuesta va contra el propio dogma de la ANC, que hasta ahora solo ha pedido el voto a los partidos que buscan la independencia de Cataluña y contra la unidad pedida hasta ahora. Tras el fracaso de la Crida de Carles Puigdemont, en un intento de fagocitar a ERC, junto a la falta de acción del PDeCat, del que se ha desentendido por completo hasta Artur Mas, expresidente de la Generalitat, se había provocado el cisma entre las dos principales formaciones del independentismo, una ruptura escenificada tras las pasadas elecciones municipales, con pactos con los socialistas del PSC, quienes votaron a favor del 155.
La sección territorial de la plataforma independentista de Sant Cugat propone copiar la estrategia de la candidatura de Eines de País a la Cámara de Comercio de Barcelona, que logró la mayoría absoluta. La institución está controlada ahora por Joan Canadell y su equipo, duros independentistas que han descartado incluso contestar en castellano a las preguntas de los periodistas.
La nueva ofensiva se enmarca en la campaña contra la política de pactos entre los independentistas y el 'bloque del 155'. La propuesta es vista no solo con buenos ojos entre los miembros de la ANC de Sant Cugat, sino también más allá de este municipio.
"La Asamblea no puede quedarse de brazos cruzados haciendo seguidismo de los partidos", ha advertido en un documento recogido por medios afines al separatismo. El movimiento responde ante la falta de firmeza a favor de la independencia de ERC, mientras que JxCat la mantiene intacta. El texto no hace referencia a la moderación de Gabriel Rufián en las últimas semanas, a quien han llegado a insultar "hijo de puta" desde su propio bando. "Los partidos están dejando de luchar por la independencia sin dejarse presionar", asegura el documento.
En este sentido, han pedido acción a la dirección de la ANC. "No hacer nada puede llevar el ANC a la irrelevancia política", ha alertado. Para iniciar este nuevo camino, desde esta territorial han recordado el éxito de la "entrada en la Cámara de Comercio" y la buena acogida de su campaña contra las empresas del Ibex 35 englobada bajo el nombre de "consumo estratégico".
La territorial de la ANC admite la frustración entre los independentistas
Tras admitir la frustración entre los independentistas, "es el momento de jugar fuerte", han considerado. Su apuesta es impulsar una candidatura específica de cara a las próximas elecciones al Parlamento de Cataluña. El objetivo es superar a toda fuerza dentro del independentismo y ponerse al frente del 'procés'.
Para ello, ha instado a Paluzie y al resto de los dirigentes a suprimir la actual hoja de ruta y demostrar que la "lucha independentista tiene como objetivo construir un país próspero, limpio, eficiente, socialmente justo, con una administración pública al servicio de todos sus ciudadanos". "Forzar el cambio en los métodos y los objetivos de los partidos soberanistas actuales, y por qué no, también en los demás", ha apuntado, al tiempo que avisa: "Si la ANC no lo hace, alguien más lo hará".
