La Diputación Permanente del Parlament ha leído este viernes una declaración de apoyo a los encausados por el 'caso Tsunami Democràtic', denunciando así una "persecución política" contra el independentismo y reclamando, además, la retirada de las acusaciones de terrorismo. "Protestar no es terrorismo. Los derechos fundamentales se defienden ejerciéndolos y tanto el independentismo y el soberanismo como la democracia necesitan que sigamos protestando", ha subrayado.
La declaración ha sido promovida por los grupos parlamentarios de ERC, JxCat, la CUP y En Comú Podem, con mayoría en la Diputación Permanente, el órgano que vela por los poderes del Parlament en el periodo entre legislaturas. Los cuatro grupos parlamentarios avalan el derecho a la protesta como un "mecanismo esencial para alcanzar cambios sociales y defender propuestas políticas legítimas como el derecho a la autodeterminación" de Cataluña.
En declaraciones a los periodistas, el presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, ha celebrado la declaración y ha remarcado que la causa del 'Tsunami Democràtic' "no es una causa solo contra doce personas, sino también contra las organizaciones que representan, contra el independentismo y el soberanismo en general y contra el ejercicio de derechos fundamentales".
Además, pide que el Estado y el Congreso de los Diputados "detengan la represión contra el movimiento independentista y los movimientos populares" y exige las modificaciones legales e internas pertinentes "para que nunca más se pueda equiparar la disidencia política al terrorismo".
