A Pere Aragonés se le agotó la paciencia. Este miércoles, tras más de tres horas reunido con el secretario general de Junts, Jordi Turull, el presidente de la Generalitat anunció que cesaba al vicepresidente Jordi Puigneró, dando un golpe sobre la mesa tras la 'deslealtad' de Junts por la la amenaza de una cuestión de confianza. Lo hizo casi a media noche, con tono firme aunque conciliador, de manera que tocaba de muerte al partido de Borràs y Turull y dejaba la pelota en su tejado para forzar su decisión final. La pelota sigue sobre el tejado de Junts, actualmente en su sede, donde llevan reunidos desde la mañana de este jueves, debatiendo cómo responder a ERC. Por ahora, la lucha por el relato en el seno del Govern se decanta del lado de los republicanos con la demostración de fuerza de Aragonés. Sin embargo, Junts medita con cautela su siguiente paso por la difícil conyuntura: si salen hoy mismo del Govern abrirían la puerta a estar en la oposición, un movimiento delicado sobre todo de cara a las citas electorales próximas pero, si se quedan, deben proponer otro nombre en la vicepresidencia, 'pasando por el haro' de ERC. Así, estos son los escenarios posibles:
Salir del Govern y golpear a Aragonés
Es la postura más extendida dentro del ala dura de Junts, promulgada por Laura Borràs y el círculo de Waterloo de Carles Puigdemont. La presidenta de Junts llevaba meses apostando por una ruptura total con ERC, sobre todo tras la decisión de Aragonés de seguir en la mesa de diálogo y, a modo más personal, por apoyar su cese como presidenta del Parlament. Al inicio de la legislatura el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ya defendía que el papel de Junts se quedara en la oposición. Esta postura no es unánime dentro del partido y Jordi Turull ha sido el garante de la unidad todo este tiempo, especialmente tras el estallido del 'caso Borràs' por la apertura de su proceso judicial. Sin embargo, en el caso de que Junts saliera del Govern, ERC se vería en el aprieto de rehacer las costuras parlamentarias al quedarse en minoría y depender de los comuns y el PSC. Tampoco sería una decisión definitiva puesto que cualquier decisión que de a conocer hoy el partido quedaría en manos de la militancia para que la ratifique.
Permanecer en el Govern y ceder a ERC
La otra opción para Junts es permanecer en el Gobierno de coalición pero, eso sí, su credibilidad quedaría tocada. Ahora mismo, con la vicepresidencia vacante, Junts tendría que proponer de inmediato a otro candidato si quiere permanecer gobernando con ERC. También puede encomendar esa propuesta a su militancia para que decida qué nombre es el que mejor puede defender los intereses del partido en el Ejecutivo catalán. Como candidatos más relevantes se encuentran el conseller de Economía, Jaume Giró, la de Exterior, Victòria Alsina, la de Universidades, Gemma Geis, el de Salud, Josep Maria Argimon, el de Derechos Sociales, Violant Cervera y la de Justicia, Lourdes Ciuró.
Encomendar su futuro a la militancia
La 'tercera vía' que se baraja en estos momentos en la sede del Passatge de Bofill en Barcelona es hacer una consulta a la militancia esta semana o la que viene para consultar la permanencia en el Govern. De esta forma mantendrían la agenda y no se precipitarían en la decisión, además de llegar a un punto medio entre los que piden una respuesta inmediata por el cese de Puigneró y los reticentes a dejar la Generalitat. Sin embargo también es una opción muy arriesgada ya que alargaría la agonía del partido y favorecería las críticas de la oposición y de sus 'socios' republicanos. Se prolongaría el clima de tensión tanto en el partido como con ERC justo en el momento en el que la CUP ha pedido votar una cuestión de confianza a Aragonés la próxima semana.
Hasta que no acabe la reunión no se sabrá qué decisión es la definitiva, ya que ningún conseller va a declarar nada a la prensa hasta que finalice el encuentro. A lo largo de la mañana, algunos miembros de la ejecutiva, como Jaume Giró o el vicepresidente de Junts Josep Rius, han ido saliendo y entrando de la sede del partido, mientras que la portavoz parlamentaria, Mònica Sales, y la vicepresidenta del partido Aurora Madaula han abandonado la sede alrededor de las 13.15 horas para ir al Parlament tras la convocatoria de una Junta de Portavoces.
Según fuentes de Junts consultadas por Efe, en la ejecutiva se están defendiendo posiciones "conocidas", con algunos consellers expresando su deseo de permanencia en el ejecutivo y los afines a Laura Borràs apostando por salir del Govern. Además de los miembros de la ejecutiva y los consellers de Junts, también participan en la reunión los presidentes de veguería del partido, sumando alrededor de unas 35 personas.
